La poderosa promesa de Dios: El mensaje de esperanza en 2 Pedro del Libro 1
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El libro del Nuevo Testamento de 2 Pedro es una carta escrita por el apóstol Pedro a los cristianos dispersos en Asia Menor. Se divide en tres capítulos y tiene como objetivo defender la fe cristiana contra los falsos maestros que estaban difundiendo enseñanzas erróneas y poniendo en peligro la pureza de la iglesia.
El capítulo uno comienza con una exhortación a crecer en la fe y en el conocimiento de Cristo. Pedro enfatiza la importancia de la virtud y la moralidad, alentando a los creyentes a desarrollar una serie de características cristianas, como la bondad, la paciencia y la piedad. También habla de la autoridad de las Escrituras, argumentando que la profecía no proviene de la voluntad del hombre, sino de Dios.
En el capítulo dos, Pedro advierte sobre los falsos profetas que introducen herejías destructivas y negan el Señor que los compró. Describe a estos falsos maestros como personas lascivas y orgullosas cuyo fin es la destrucción, y los compara con los falsos profetas del Antiguo Testamento. Pedro les recuerda a los creyentes que Dios no tarda en cumplir sus promesas, y que la paciencia del Señor es para nuestra salvación.
Finalmente, el capítulo tres habla del regreso del Señor Jesucristo y el juicio final. Pedro argumenta que los escépticos burlándose del evento no entienden que la paciencia de Dios los estaba esperando a que ellos se arrepintieran. Pedro enfatiza la importancia de la santidad de vida y de la espera de la venida del Señor, y anima a los cristianos a crecer en la gracia y el conocimiento de Jesucristo.
En resumen, el libro de 2 Pedro es una exhortación a mantenerse fieles a Cristo en medio de la persecución y la falsa doctrina. Pedro anima a los creyentes a crecer en la fe y la virtud, a alentar a otros a seguir a Cristo y a esperar con paciencia la venida del Señor.
Pincha en cada uno de los versículos para obterner una explicación más detallada de él.
2Pe 1:1 Simón Pedro, siervo y apóstol de Jesucristo, a los que habéis alcanzado, por la justicia de nuestro Dios y Salvador Jesucristo, una fe igualmente preciosa que la nuestra:
2Pe 1:1 El versículo 2Pe 1:1 del Nuevo Testamento es una introducción de la carta del apóstol Pedro a los creyentes de la fe cristiana. Pedro se identifica como el autor de la carta y hace hincapié en su posición como siervo y apóstol de Jesucristo. En el segundo párrafo, Pedro se dirige a los destinatarios de la carta, diciendo que ellos han alcanzado una fe igualmente preciosa que la suya propia, a través de la justicia de Dios y la salvación de Jesucristo. Esto significa que todos los creyentes cristianos, independientemente de su origen o estatus, tienen acceso a la misma fe y salvación que Pedro y los demás apóstoles tuvieron. Pedro está animando a los creyentes a tener confianza y seguridad en su fe, ya que es igualmente valiosa y preciosa que la fe de los apóstoles. Además, Pedro también está reconociendo que la fe es un regalo de Dios y no se puede ganar o merecer a través de las obras humanas, sino que es a través de la justicia de Dios y la salvación de Jesucristo.
2Pe 1:2 Gracia y paz os sean multiplicadas, en el conocimiento de Dios y de nuestro Señor Jesús.
2Pe 1:2 Este versículo es parte de una carta que el apóstol Pedro escribió a las congregaciones de cristianos que estaban dispersas por diferentes lugares. La salutación que el apóstol utiliza es común en todas sus cartas y es una expresión de sus deseos y bendiciones para los destinatarios. En este caso, Pedro desea que la gracia y la paz se multipliquen en la vida de los creyentes. La gracia se refiere al amor y la misericordia de Dios manifestados en la salvación que nos ofrece a través de Jesucristo. La paz se refiere a la paz que tenemos en nuestro corazón al haber aceptado a Cristo como nuestro Salvador y haber sido reconciliados con Dios. Estos deseos de multiplicación de gracia y paz tienen un propósito: el conocimiento de Dios y de Jesucristo. Pedro quiere que los creyentes no solo conozcan a Dios en sentido teórico, sino que tengan una experiencia personal de Él. Quiere que su relación con Dios y con Jesucristo sea más profunda y significativa. En resumen, este versículo es una expresión de los deseos de Pedro para los destinatarios de su carta. Quiere que la gracia y la paz de Dios se multipliquen en sus vidas y que este crecimiento resulte en un conocimiento más profundo y significativo de Él.
2Pe 1:3 Como todas las cosas que pertenecen a la vida y a la piedad nos han sido dadas por su divino poder, mediante el conocimiento de aquel que nos llamó por su gloria y excelencia,
2Pe 1:3 Este versículo nos enseña que todo lo que necesitamos para tener una vida piadosa nos ha sido dado por el poder divino de Dios. Esto se ha logrado a través del conocimiento de Cristo, quien nos ha llamado para ser sus seguidores y revelarnos su gloria y excelencia. En otras palabras, Dios nos ha dado todo lo que necesitamos para ser piadosos y vivir una vida plena y satisfactoria a través de su poder y amor.
2Pe 1:4 por medio de las cuales nos ha dado preciosas y grandísimas promesas, para que por ellas llegaseis a ser participantes de la naturaleza divina, habiendo huido de la corrupción que hay en el mundo a causa de la concupiscencia;
2Pe 1:4 Este versículo se refiere a las promesas que Dios ha dado a los creyentes, que son preciosas y grandísimas. Estas promesas son la clave para que podamos participar en la naturaleza divina de Dios. Esto significa que, a través de la fe en Jesucristo, podemos experimentar una transformación en nuestra vida y ser más parecidos a Dios en nuestro carácter y acciones. El versículo también señala que estas promesas nos ayudan a huir de la corrupción que está presente en el mundo debido a los deseos egoístas y pecaminosos de las personas. Por lo tanto, podemos vivir una vida santa y pura, basada en la fe en Dios y su Palabra. En resumen, el versículo nos enseña que a través de las promesas de Dios, podemos experimentar una transformación en nuestra vida y ser más parecidos a Él, y escapar de la corrupción del mundo guiados por nuestra concupiscencia.
2Pe 1:5 vosotros también, poniendo toda diligencia por esto mismo, añadid a vuestra fe virtud; a la virtud, conocimiento;
2Pe 1:5 Este versículo habla sobre el crecimiento espiritual de un creyente en Jesucristo. La fe es el primer paso hacia la salvación, pero es importante añadir virtud y conocimiento a esa fe. La virtud se refiere a la conducta moral correcta y la honradez, mientras que el conocimiento se refiere a una comprensión profunda de la Palabra de Dios y de los caminos de Dios. El versículo insta a los creyentes a esforzarse conscientemente en desarrollar estas cualidades, para que puedan crecer espiritualmente y ser más efectivos en su servicio a Dios.
2Pe 1:6 al conocimiento, dominio propio; al dominio propio, paciencia; a la paciencia, piedad;
2Pe 1:6 Este versículo formar parte de una lista de virtudes cristianas que el apóstol Pedro enumera en su segunda carta. Él enfatiza la importancia de agregar estas virtudes a la fe, para no ser inactivos ni improductivos en el conocimiento de nuestro Señor Jesucristo. En este versículo en especifico, Pedro enseña que el conocimiento es la base para el desarrollo de la virtud del dominio propio. El dominio propio se refiere a la capacidad de controlar nuestros impulsos y emociones, y actuar de manera acorde a los principios cristianos. Para desarrollar la virtud de la paciencia, es necesario tener dominio propio, ya que a menudo la ira y la impaciencia surgen de la falta de control emocional. Finalmente, la paciencia que se desarrolle nos llevará a ser más piadosos, es decir, más devotos a Dios y a las enseñanzas de Jesús. En resumen, Pedro está llamando a los cristianos a crecer en conocimiento de Dios, lo que les permitirá desarrollar virtudes como el dominio propio, la paciencia y la piedad, y así llevar una vida plena y productiva en la fe.
2Pe 1:7 a la piedad, afecto fraternal; y al afecto fraternal, amor.
2Pe 1:7 Este verso se encuentra en la segunda carta de Pedro en el Nuevo Testamento. Se refiere a una lista de virtudes cristianas y cómo se relacionan entre sí. El verso dice: "Añadan a su fe, virtud; a la virtud, conocimiento; al conocimiento, dominio propio; al dominio propio, paciencia; a la paciencia, piedad; a la piedad, afecto fraternal; y al afecto fraternal, amor." Aquí, Pedro está explicando que la piedad es una virtud que puede ser cultivada por los cristianos, y que la piedad lleva al afecto fraternal. Y este afecto fraternal, a su vez, lleva al amor. La idea es que estas virtudes se construyen gradualmente, una sobre otra, y que cada una es importante para alcanzar la siguiente. En resumen, el versículo resalta la importancia de la piedad como un paso importante en el camino hacia el amor, que es uno de los principales mandatos cristianos.
2Pe 1:8 Porque si estas cosas están en vosotros, y abundan, no os dejarán estar ociosos ni sin fruto en cuanto al conocimiento de nuestro Señor Jesucristo.
2Pe 1:8 Este versículo de 2 Pedro 1:8 se refiere a las cualidades que deben tener los seguidores de Jesús. Pedro les está diciendo que si tienen estas cualidades en abundancia, no estarán ociosos ni serán infructuosos en su conocimiento de Jesús, lo cual significa que no estarán inactivos o estancados en su fe. Las cualidades mencionadas anteriormente en este capítulo incluyen la fe, la virtud, el conocimiento, la paciencia, la piedad, la bondad fraternal y el amor. Si los seguidores de Jesús tienen estas cualidades en abundancia, serán fructíferos en su conocimiento y servicio a Jesús, y no se detendrán en su crecimiento espiritual.
2Pe 1:9 Pero el que no tiene estas cosas tiene la vista muy corta; es ciego, habiendo olvidado la purificación de sus antiguos pecados.
2Pe 1:9 Este versículo hace referencia a la incapacidad de una persona para reconocer su propio pecado y su necesidad de salvación. Alguien que no ha experimentado la transformación de su vida a través de la fe en Cristo, y que no lleva una vida de obediencia y crecimiento espiritual, tiene una vista distorsionada de la realidad. La persona ciega en este versículo ha olvidado la obra salvadora de Cristo y la purificación del pecado que ofrece, lo que demuestra su falta de madurez espiritual y su necesidad de arrepentimiento y redención.
2Pe 1:10 Por lo cual, hermanos, tanto más procurad hacer firme vuestra vocación y elección; porque haciendo estas cosas, no caeréis jamás.
2Pe 1:10 Este versículo se encuentra en la segunda carta de Pedro en el Nuevo Testamento y hace referencia a la importancia de asegurarse de mantenerse firmes en la fe cristiana. La "vocación y elección" a la que se refiere Pedro se trata del llamado de Dios a seguir el camino cristiano y ser elegidos para la vida eterna a través de la fe en Jesucristo. Pedro les insta a los hermanos (es decir, otros creyentes) a esforzarse aún más por mantenerse firmes en su fe y no caer en la tentación o el pecado. Al hacer esto, se asegurarán de que su llamado y elección son verdaderos y seguros, y que no serán engañados por falsos profetas o influencias mundanas. En resumen, este versículo enfatiza la necesidad de mantener una vida cristiana comprometida y fiel para asegurarnos de que nuestro llamado y elección sean verdaderos y firmes, y que seamos capaces de resistir las tentaciones mundanas y permanecer fieles a Dios.
2Pe 1:11 Porque de esta manera os será otorgada amplia y generosa entrada en el reino eterno de nuestro Señor y Salvador Jesucristo.
2Pe 1:11 El versículo 2 Pedro 1:11 del Nuevo Testamento significa que si seguimos a Jesucristo y trabajamos en nuestra relación con él, tendremos una entrada amplia y generosa en el reino eterno de Dios después de nuestra muerte. Es una promesa de que si ponemos nuestra fe y confianza en Jesucristo y vivimos nuestras vidas de acuerdo con sus enseñanzas, seremos recompensados con la vida eterna en el reino de Dios. Este versículo nos invita a perseverar en nuestra fe y a trabajar en nuestro crecimiento espiritual para obtener la plena recompensa que Dios tiene reservada para nosotros.
2Pe 1:12 Por esto, yo no dejaré de recordaros siempre estas cosas, aunque vosotros las sepáis, y estéis confirmados en la verdad presente.
2Pe 1:12 Este versículo del 2do libro de Pedro habla sobre el papel del apóstol Pedro en recordar y reafirmar la verdad presente a los creyentes. Aunque ellos ya conocen la verdad, Pedro siente la responsabilidad de recordarles constantemente la importancia de mantenerse firmes en la verdad y nunca desviarse de ella. Su objetivo es fortalecer la fe de los creyentes y asegurarse de que nunca olviden las enseñanzas importantes que recibieron. En resumen, Pedro está haciendo hincapié en la importancia de mantenerse fieles a la verdad y recordarla siempre.
2Pe 1:13 Pues tengo por justo, en tanto que estoy en este cuerpo, el despertaros con amonestación;
2Pe 1:13 En este versículo el apóstol Pedro habla acerca de su deseo de animar y advertir a los creyentes para que estén alerta y vigilantes en su vida espiritual. Él está diciendo que, mientras esté en su cuerpo mortal, su propósito es llamar la atención de los creyentes por medio de amonestaciones para que estén alerta en su fe y en su vida cristiana. Pedro reconoce la importancia de mantener la vida cristiana en una perspectiva correcta y estar vigilantes ante las tentaciones y distracciones que puedan afectarla.
2Pe 1:14 sabiendo que en breve debo abandonar el cuerpo, como nuestro Señor Jesucristo me ha declarado.
2Pe 1:14 Este versículo es una afirmación del apóstol Pedro en la que dice que sabe que su tiempo en la tierra está llegando a su fin y que pronto tendrá que abandonar su cuerpo físico. Él compara su situación con la de Jesús, quien también sabía que pronto sería crucificado y que tendría que abandonar su cuerpo. Pedro está seguro de que su muerte está cerca y que debe prepararse para ella. Él también puede estar comunicando que Dios le ha revelado la cercanía de su muerte y que debe estar listo para enfrentarla. En resumen, este versículo muestra la seguridad de Pedro en la voluntad de Dios y su disposición a enfrentar la muerte con valentía y fe.
2Pe 1:15 También yo procuraré con diligencia que después de mi partida vosotros podáis en todo momento tener memoria de estas cosas.
2Pe 1:15 Este versículo es parte de una carta escrita por el apóstol Pedro a una comunidad cristiana. En él, Pedro dice que hará todo lo posible para asegurarse de que después de que él muera, la gente recuerde las enseñanzas que ha compartido con ellos. Pedro se preocupa por mantener el mensaje de Jesús vivo y vivo en la comunidad cristiana, y busca asegurarse de que las personas recuerden las verdades que ha compartido con ellas. En resumen, Pedro desea que los creyentes retengan los conocimientos y las enseñanzas que ha compartido con ellos, incluso después de que él se haya ido.
2Pe 1:16 Porque no os hemos dado a conocer el poder y la venida de nuestro Señor Jesucristo siguiendo fábulas artificiosas, sino como habiendo visto con nuestros propios ojos su majestad.
2Pe 1:16 Este versículo significa que los apóstoles no estaban compartiendo historias inventadas sobre el poder y la venida de Jesucristo, sino que ellos mismos habían sido testigos de Su majestad. Ellos habían visto y experimentado el poder de Su vida, muerte y resurrección, y querían transmitir esa verdad con autenticidad y veracidad a los demás. En resumen, este versículo destaca la importancia de la verdad y la autenticidad en la enseñanza cristiana.
2Pe 1:17 Pues cuando él recibió de Dios Padre honra y gloria, le fue enviada desde la magnífica gloria una voz que decía: Este es mi Hijo amado, en el cual tengo complacencia.
2Pe 1:17 Este versículo se refiere a un momento en el que Jesús recibió una confirmación de su identidad y su relación con Dios. La "honra y gloria" que recibió fueron una expresión de la aprobación de Dios por su vida y su obra. La voz que se escuchó desde la "magnífica gloria" confirmó que Jesús era el Hijo amado de Dios en quien él tenía complacencia. Este pasaje es un recordatorio de la importancia de la fe en Jesús como Hijo de Dios y de la necesidad de buscar la aprobación divina en nuestras propias vidas.
2Pe 1:18 Y nosotros oímos esta voz enviada del cielo, cuando estábamos con él en el monte santo.
2Pe 1:18 Este versículo se refiere a un evento que sucedió durante la vida de Jesús, en el que algunos de sus discípulos lo acompañaron a un lugar conocido como el monte santo. Allí, ellos oyeron una voz que vino del cielo y que se atribuye a Dios, en la que se afirmaba que Jesús era su Hijo amado. Este evento es conocido como la Transfiguración, y se interpreta como una muestra de la divinidad de Jesús y una confirmación de su autoridad. Los discípulos que lo presenciaron se sintieron profundamente impactados por esta experiencia, y se convirtió en un momento clave de su fe y su compromiso con Jesús.
2Pe 1:19 Tenemos también la palabra profética más segura, a la cual hacéis bien en estar atentos como a una antorcha que alumbra en lugar oscuro, hasta que el día esclarezca y el lucero de la mañana salga en vuestros corazones;
2Pe 1:19 El versículo habla sobre la importancia de prestar atención a la palabra profética, que se considera más segura. Esto significa que las enseñanzas y la orientación contenidas en ella son confiables y precisas. La palabra profética se refiere a las enseñanzas de la Biblia en general, pero también puede referirse específicamente a las profecías del Antiguo Testamento y a las profecías de los apóstoles en el Nuevo Testamento. El versículo también compara la palabra profética con una antorcha, que ilumina un lugar oscuro y guía a las personas hacia la luz. Esta metáfora sugiere que la palabra profética es un camino para encontrar y seguir la verdad, y un camino para escapar de la oscuridad y la confusión. Además, el versículo habla de la claridad que viene cuando el "día esclarezca" y el "lucero de la mañana salga en vuestros corazones". Esto se refiere a la iluminación y la comprensión que se logra cuando se sigue la palabra profética y se llega a una relación personal con Dios. En otras palabras, cuando las personas aceptan y aplican la palabra profética en sus vidas, encuentran la verdad y la claridad que necesitan para vivir de manera plena y significativa.
2Pe 1:20 entendiendo primero esto, que ninguna profecía de la Escritura es de interpretación privada,
2Pe 1:20 Este versículo significa que nadie tiene el derecho de interpretar la Biblia a su manera, ni de interpretar sus propias profecías. En vez de eso, se debe entender que la interpretación de la Escritura es un asunto serio y que debe ser hecho de manera cuidadosa y respetuosa, ya que el texto bíblico es la palabra de Dios y debe ser tratado con el debido respeto y reverencia. Por lo tanto, los creyentes deben buscar la guía del Espíritu Santo y la sabiduría de los líderes espirituales para comprender la verdadera enseñanza bíblica.
2Pe 1:21 porque nunca la profecía fue traída por voluntad humana, sino que los santos hombres de Dios hablaron siendo inspirados por el Espíritu Santo.
2Pe 1:21 Este verso de la segunda carta de Pedro está diciendo que ninguna de las profecías de Dios fueron inventadas o creadas por voluntad humana, sino que fueron habladas por los "santos hombres de Dios" que fueron inspirados por el Espíritu Santo. Esto significa que Dios les dio la capacidad de entender y comunicar sus mensajes, y que estos mensajes eran verdaderos y venían directamente de Dios. En resumen, este versículo nos recuerda que todas las profecías son de Dios, y que la verdad solo puede ser encontrada a través de su inspiración divina.