Explorando la riqueza espiritual de Efesios: Descubre las enseñanzas transformadoras del Nuevo Testamento


El libro de Efesios es uno de los libros del Nuevo Testamento de la Biblia, escrito por el apóstol Pablo y dirigido a la comunidad cristiana de Éfeso. Se divide en seis capítulos y trata temas importantes como la identidad del creyente, la unidad de la iglesia y la vida cristiana práctica. El tercer capítulo de Efesios es una profunda reflexión sobre el ministerio de Pablo y la revelación que recibió de parte de Dios acerca de la naturaleza de la iglesia. En este capítulo, Pablo describe el misterio de la unidad de los gentiles y los judíos en Cristo y cómo esta unidad es un reflejo del plan divino para la redención de la humanidad. El capítulo comienza con Pablo describiéndose a sí mismo como un "prisionero de Cristo Jesús" y explicando que su encarcelamiento no ha sido en vano, sino que ha sido la oportunidad para predicar el evangelio a los gentiles. Luego, el apóstol revela el misterio que Dios le ha dado acerca de la unidad de los gentiles y los judíos en Cristo. Pablo explica que este misterio es que los gentiles son coherederos con los judíos, miembros del mismo cuerpo y participantes del mismo pacto de promesa. El apóstol enfatiza que esto se debe a la gracia de Dios y no a la obra de los hombres. Además, Pablo aclara que esta unidad en Cristo no significa que los gentiles se conviertan en judíos ni que los judíos pierdan su identidad, sino que ambos son reconciliados en un solo cuerpo por medio de la cruz de Jesucristo. En los siguientes versículos, Pablo se refiere a su ministerio y su función como apóstol, diciendo que ha sido llamado para predicar entre los gentiles las insondables riquezas de Cristo y hacer que todos comprendan el plan de Dios para la iglesia. El apóstol se muestra profundamente humilde ante la responsabilidad que tiene y dice que es un "siervo" y un "administrador" de la gracia de Dios. El capítulo concluye con una oración de Pablo por los creyentes en Efeso, pidiendo a Dios que les conceda fortaleza en su interior por medio del Espíritu Santo para que Cristo habite en sus corazones por la fe, y que sean capaces de comprender la amplitud, la longitud, la profundidad y la altura del amor de Cristo, que sobrepasa todo conocimiento y que les llena de toda la plenitud de Dios. En resumen, el tercer capítulo del libro de Efesios es una reflexión profunda sobre la unidad de la iglesia en Cristo, un misterio revelado a Pablo por la gracia de Dios. El apóstol enfatiza la importancia de su ministerio como apóstol para hacer que esta unidad sea una realidad en la vida de los creyentes y concluye el capítulo con una oración por la fortaleza y comprensión de aquellos que creen en Cristo.

Pincha en cada uno de los versículos para obterner una explicación más detallada de él.

Eph 3:1 Por esta causa yo Pablo, prisionero de Cristo Jesús por vosotros los gentiles;
Eph 3:2 si es que habéis oído de la administración de la gracia de Dios que me fue dada para con vosotros;
Eph 3:3 que por revelación me fue declarado el misterio, como antes lo he escrito brevemente,
Eph 3:4 leyendo lo cual podéis entender cuál sea mi conocimiento en el misterio de Cristo,
Eph 3:5 misterio que en otras generaciones no se dio a conocer a los hijos de los hombres, como ahora es revelado a sus santos apóstoles y profetas por el Espíritu:
Eph 3:6 que los gentiles son coherederos y miembros del mismo cuerpo, y copartícipes de la promesa en Cristo Jesús por medio del evangelio,
Eph 3:7 del cual yo fui hecho ministro por el don de la gracia de Dios que me ha sido dado según la operación de su poder.
Eph 3:8 A mí, que soy menos que el más pequeño de todos los santos, me fue dada esta gracia de anunciar entre los gentiles el evangelio de las inescrutables riquezas de Cristo,
Eph 3:9 y de aclarar a todos cuál sea la dispensación del misterio escondido desde los siglos en Dios, que creó todas las cosas;
Eph 3:10 para que la multiforme sabiduría de Dios sea ahora dada a conocer por medio de la iglesia a los principados y potestades en los lugares celestiales,
Eph 3:11 conforme al propósito eterno que hizo en Cristo Jesús nuestro Señor,
Eph 3:12 en quien tenemos seguridad y acceso con confianza por medio de la fe en él;
Eph 3:13 por lo cual pido que no desmayéis a causa de mis tribulaciones por vosotros, las cuales son vuestra gloria.
Eph 3:14 Por esta causa doblo mis rodillas ante el Padre de nuestro Señor Jesucristo,
Eph 3:15 de quien toma nombre toda familia en los cielos y en la tierra,
Eph 3:16 para que os dé, conforme a las riquezas de su gloria, el ser fortalecidos con poder en el hombre interior por su Espíritu;
Eph 3:17 para que habite Cristo por la fe en vuestros corazones, a fin de que, arraigados y cimentados en amor,
Eph 3:18 seáis plenamente capaces de comprender con todos los santos cuál sea la anchura, la longitud, la profundidad y la altura,
Eph 3:19 y de conocer el amor de Cristo, que excede a todo conocimiento, para que seáis llenos de toda la plenitud de Dios.
Eph 3:20 Y a Aquel que es poderoso para hacer todas las cosas mucho más abundantemente de lo que pedimos o entendemos, según el poder que actúa en nosotros,
Eph 3:21 a él sea gloria en la iglesia en Cristo Jesús por todas las edades, por los siglos de los siglos. Amén.

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