Nuevas enseñanzas y sabiduría: Explorando el libro 4 del Nuevo Testamento - 1 Tesalonicenses
Compartir
El libro del Nuevo Testamento de 1 Tesalonicenses, capítulo 4, se enfoca en la importancia del comportamiento moral de los cristianos. El apóstol Pablo escribe a la comunidad de Tesalónica para corregir algunas prácticas inmorales y para exhortarlos a mantenerse firmes en su fe.
La sección comienza con Pablo instruyendo a los tesalonicenses sobre cómo deben honrar a Dios viviendo vidas santas y puras. Él los llama a abstenerse de la impureza sexual y les recuerda que Dios les ha llamado a vivir en santidad y pureza. También les exhorta a trabajar duro, a ser pacíficos y a no vengarse de sus enemigos.
Pablo les habla sobre la venida del Señor, animándolos a estar alerta y preparados para su venida. Él les dice que aquellos que mueren en la fe no están perdidos, sino que resucitarán en Cristo cuando Él regrese. También les recuerda que la venida del Señor no vendrá como un ladrón en la noche para aquellos que están en la luz, es decir, aquellos que están viviendo en la verdad y en la luz de Cristo.
En el capítulo 4 de 1 Tesalonicenses, Pablo enfatiza la importancia de vivir de manera santa y pura, evitando la inmoralidad sexual y siendo fieles a Dios. Pablo también habla de la importancia de estar preparados para la venida del Señor y de cómo los cristianos que mueren en la fe resucitarán con Él en ese gran día. El capítulo termina con Pablo animando a los tesalonicenses a edificar y alentar a los demás.
Pincha en cada uno de los versículos para obterner una explicación más detallada de él.
1Th 4:1 Por lo demás, hermanos, os rogamos y exhortamos en el Señor Jesús, que de la manera que aprendisteis de nosotros cómo os conviene conduciros y agradar a Dios, así abundéis más y más.
1Th 4:1 En este versículo, el apóstol Pablo está exhortando a los hermanos en Cristo a que vivan de tal manera que agraden a Dios. Él está recordando que ellos ya han aprendido cómo vivir de una manera piadosa y correcta, y los insta a seguir creciendo en ese camino, viviendo para el Señor Jesús y buscando cada vez agradarle más mediante sus acciones y actitudes. El objetivo es que ellos abunden más y más en la gracia de Dios y en su conocimiento, de tal manera que puedan ser mejores testigos de Jesús ante el mundo y puedan cumplir su propósito en la vida.
1Th 4:2 Porque ya sabéis qué instrucciones os dimos por el Señor Jesús;
1Th 4:2 En este versículo, el apóstol Pablo está hablando a los creyentes de Tesalónica acerca de las instrucciones que les dio en relación con cómo deben vivir sus vidas en Cristo. La frase "por el Señor Jesús" significa que estas instrucciones fueron dadas por Jesús mismo, ya sea durante su vida terrenal o a través del Espíritu Santo después de su ascenso. Pablo está recordando a los creyentes que han recibido estas instrucciones y deben vivir según ellas.
1Th 4:3 pues la voluntad de Dios es vuestra santificación; que os apartéis de fornicación;
1Th 4:3 Este versículo de 1 Tesalonicenses 4:3 establece que la voluntad de Dios para los creyentes es que vivan santamente. Esto significa vivir de una manera que refleje la santidad de Dios y evite el pecado. Parte de esa santidad es evitar la inmoralidad sexual, incluyendo la fornicación. Dios nos llama a no tener relaciones sexuales fuera del matrimonio, porque es contrario a su plan para nuestras vidas y puede dañar nuestra relación con él y con otras personas. Por lo tanto, si queremos seguir la voluntad de Dios, debemos esforzarnos por vivir en santidad y evitar cualquier tipo de inmoralidad sexual.
1Th 4:4 que cada uno de vosotros sepa tener su propia esposa en santidad y honor;
1Th 4:4 Este versículo se encuentra en la Primera Epístola de Pablo a los Tesalonicenses y se refiere a la importancia de la castidad y la fidelidad en el matrimonio. El contexto del versículo es la exhortación de Pablo a la iglesia de Tesalónica para que eviten la inmoralidad sexual y se mantengan puros y santos. Pablo les dice que cada uno de ellos debe tener su propia esposa (o esposo) y vivir en santidad y honor con ella. En otras palabras, el matrimonio debe ser una relación de respeto mutuo, donde el amor y la fidelidad son los fundamentos de una vida matrimonial exitosa. Este versículo es una llamada a la responsabilidad individual en el matrimonio y una exhortación a respetar a la pareja y mantenerse alejados de la inmoralidad sexual.
1Th 4:5 no en pasión de concupiscencia, como los gentiles que no conocen a Dios;
1Th 4:5 Este verso se encuentra en la Primera Epístola de Pablo a los Tesalonicenses, capítulo 4, versículo 5. En este versículo, Pablo les insta a los tesalonicenses a no vivir como los gentiles que no conocen a Dios, quienes se dejan llevar por sus deseos sexuales y pasiones carnales. En cambio, les anima a vivir una vida santa y pura, y a abstenerse de todo tipo de conducta inmoral y lasciva. La idea aquí es que aquellos que han sido redimidos por la gracia de Dios y han sido llamados a su servicio deben diferenciarse en su forma de vivir de aquellos que no conocen a Dios y viven de acuerdo con sus propias pasiones y deseos.
1Th 4:6 que ninguno agravie ni engañe en nada a su hermano; porque el Señor es vengador de todo esto, como ya os hemos dicho y testificado.
1Th 4:6 Este versículo de 1 Tesalonicenses 4:6 nos habla sobre la importancia de tratar a nuestros hermanos con respeto y honestidad. Nos dice que no debemos hacerles daño o engañarlos de ninguna manera. Si lo hacemos, el Señor tomará venganza por eso. En otras palabras, aquellos que hacen mal a otros no pueden escapar del juicio de Dios, que es justo y vengativo. Como cristianos, debemos amarnos y respetarnos los unos a los otros, buscar la paz y la justicia, y confiar en que Dios nos protege y nos rige en todas nuestras acciones.
1Th 4:7 Pues no nos ha llamado Dios a inmundicia, sino a santificación.
1Th 4:7 Este versículo significa que Dios no nos ha llamado para ser impuros o inmorales, sino que nos ha llamado para ser santos y vivir una vida moralmente pura. Como seguidores de Jesús, debemos esforzarnos por vivir en obediencia a su Palabra y vivir una vida que refleje la santidad y el carácter de Dios. Esto significa abandonar nuestros viejos hábitos pecaminosos y buscar la pureza y la santidad en todo lo que hacemos.
1Th 4:8 Así que, el que desecha esto, no desecha a hombre, sino a Dios, que también nos dio su Espíritu Santo.
1Th 4:8 Este versículo se refiere a la enseñanza de la santificación en la vida de un creyente. El apóstol Pablo está diciendo que aquel que desecha la llamada a la santificación, no está desechando simplemente una enseñanza humana, sino que está rechazando el mandato de Dios. Él nos ha dado su Espíritu Santo para guiarnos en la vida diaria y nos llama a vivir una vida santa y pura. Por lo tanto, la persona que rechaza esto no solo está desobedeciendo a los líderes de la iglesia o a otros creyentes, sino que está desobedeciendo directamente a Dios.
1Th 4:9 Pero acerca del amor fraternal no tenéis necesidad de que os escriba, porque vosotros mismos habéis aprendido de Dios que os améis unos a otros;
1Th 4:9 Este versículo se refiere al amor que debe existir entre hermanos y hermanas en la fe cristiana. El apóstol Pablo les recuerda a los creyentes de Tesalónica que ellos no necesitan que se les escriba sobre el amor fraternal, porque han aprendido de Dios mismo que deben amarse unos a otros. Es decir, ellos ya saben que deben tener un amor sincero, desinteresado y perseverante entre sí como miembros de la familia de Dios. Esto se basa en el mandamiento de Jesús de amar al prójimo como a uno mismo (Mateo 22:39) y en otros pasajes bíblicos que hablan de la importancia del amor en la comunidad de creyentes (Juan 13:34-35; Romanos 12:10; 1 Juan 4:7-8). En resumen, la exhortación de Pablo es que los cristianos mantengan y cultiven un amor fraternal auténtico, que sea un testimonio del amor de Dios en sus vidas.
1Th 4:10 y también lo hacéis así con todos los hermanos que están por toda Macedonia. Pero os rogamos, hermanos, que abundéis en ello más y más;
1Th 4:10 Este versículo se encuentra en la Primera Carta a los Tesalonicenses, capítulo 4, verso 10, y habla sobre cómo los creyentes de Tesalónica deben seguir tratando a sus hermanos en la fe en toda Macedonia. La primera parte del versículo dice que los tesalonicenses ya están practicando esta buena conducta, pero los escritores de la carta les piden que sigan continuando en ella y que la aumenten cada vez más. Como cristianos, debemos tener una actitud de amor, respeto y servicio hacia todos los que comparten nuestra fe y, al hacerlo, fomentar una comunidad de hermandad en la que se refleje el amor de Dios.
1Th 4:11 y que procuréis tener tranquilidad, y ocuparos en vuestros negocios, y trabajar con vuestras manos de la manera que os hemos mandado,
1Th 4:11 Este versículo se refiere a la importancia de vivir una vida tranquila y ocupada en nuestras actividades cotidianas. La idea principal es que debemos ser responsables en nuestros trabajos y deberes, y trabajar de la manera que se nos ha enseñado, en lugar de ser perezosos y depender de otros para nuestras necesidades. También se nos insta a mantener la paz y la serenidad en todo momento. En resumen, debemos ser trabajadores diligentes y gente pacífica y tranquila en todas nuestras interacciones diarias.
1Th 4:12 a fin de que os conduzcáis honradamente para con los de afuera, y no tengáis necesidad de nada.
1Th 4:12 Este versículo se encuentra en la Primera Epístola a los Tesalonicenses y habla de la importancia de que los cristianos mantengan una conducta honrada frente a aquellos que no comparten su fe. La idea es que al comportarse de manera digna y respetable, los creyentes podrán ganarse el respeto de aquellos que no creen en Dios y así ser un testimonio efectivo del amor de Cristo en el mundo. Además, el versículo también menciona que al actuar de esta manera, los cristianos no tendrán necesidad de nada. Es decir, si viven honestamente y con integridad, podrán confiar en que Dios proveerá para sus necesidades y no tendrán que depender de las ayudas de otros. En resumen, el versículo invita a los creyentes a ser una luz en el mundo y a confiar en la provisión divina para sus vidas.
1Th 4:13 Tampoco queremos, hermanos, que ignoréis acerca de los que duermen, para que no os entristezcáis como los otros que no tienen esperanza.
1Th 4:13 En este versículo, el apóstol Pablo está hablando a los creyentes en Tesalónica acerca de la muerte y cómo deben entenderla. Él les dice que no quiere que estén sin conocimiento o ignorantes acerca de aquellos creyentes que han muerto (los que duermen), para que no se entristezcan como lo harían los incrédulos que no tienen esperanza en la vida después de la muerte. En otras palabras, los creyentes cristianos tienen la esperanza de la resurrección y la vida eterna en Cristo, por lo que no deben estar desesperados o tristes como aquellos que no tienen esta promesa. Pablo les está animando a confiar en la esperanza que tienen en Cristo, incluso en medio de la muerte.
1Th 4:14 Porque si creemos que Jesús murió y resucitó, así también traerá Dios con Jesús a los que durmieron en él.
1Th 4:14 Este versículo se refiere a la creencia cristiana en la resurrección de los muertos en Cristo. Afirma que aquellos que creen en Jesús y mueren en él, serán resucitados por Dios y reunidos con Jesús en su segundo advenimiento. La idea es que la muerte no es el final para los seguidores de Jesús, sino simplemente una transición a una nueva vida en la presencia de Dios. Esta creencia es una fuente de esperanza y consuelo para los cristianos que han perdido a seres queridos.
1Th 4:15 Por lo cual os decimos esto en palabra del Señor: que nosotros que vivimos, que habremos quedado hasta la venida del Señor, no precederemos a los que durmieron.
1Th 4:15 Este versículo habla sobre la segunda venida de Jesús y cómo resucitará a los creyentes que murieron antes de su llegada. El apóstol Pablo asegura que aquellos que estén vivos en el momento de la venida del Señor no tendrán prioridad sobre aquellos que murieron en la fe antes de este evento. Todos serán resucitados y reunidos juntos para encontrarse con el Señor. En resumen, este versículo subraya la esperanza en la resurrección y el encuentro con el Señor en el fin de los tiempos.
1Th 4:16 Porque el Señor mismo con voz de mando, con voz de arcángel, y con trompeta de Dios, descenderá del cielo; y los muertos en Cristo resucitarán primero.
1Th 4:16 Este versículo habla de la segunda venida de Jesucristo, donde él mismo vendrá desde el cielo con una voz de mando y con la ayuda de un arcángel y una trompeta divina. Los muertos que murieron creyendo en Cristo resucitarán primero y estarán unidos con los vivos que se encuentren en ese momento. En resumen, este versículo destaca que habrá una resurrección y un juicio final.
1Th 4:17 Luego nosotros los que vivimos, los que hayamos quedado, seremos arrebatados juntamente con ellos en las nubes para recibir al Señor en el aire, y así estaremos siempre con el Señor.
1Th 4:17 Este versículo se refiere al evento conocido como el "arrebatamiento", que es cuando los creyentes en Jesucristo serán llevados al cielo para estar con él. Según este verso, los creyentes que mueran primero serán resucitados de entre los muertos, y junto con los creyentes que todavía están vivos en ese momento, serán llevados al cielo para encontrarse con el Señor Jesús en las nubes. Esta reunión con el Señor es un evento muy esperado por los creyentes, ya que significa la culminación de toda la obra redentora de Jesús y la comunión eterna con él.
1Th 4:18 Por tanto, alentaos los unos a los otros con estas palabras.
1Th 4:18 Este versículo se encuentra en la primera carta de Pablo a los Tesalonicenses en el Nuevo Testamento de la Biblia. Pablo está hablando sobre el regreso de Cristo y cómo los creyentes deben vivir en preparación para este evento. En particular, él está hablando sobre cómo los creyentes que han fallecido serán resucitados cuando Cristo regrese y cómo aquellos que aún estén vivos en ese momento se reunirán con ellos en el cielo. La parte del versículo que dice "Por tanto, alentaos los unos a los otros con estas palabras" significa que los creyentes deben consolarse mutuamente y ayudarse a prepararse para la venida de Cristo. Pablo está diciendo que los cristianos deben alentarse unos a otros con la esperanza de la resurrección y el encuentro con Cristo en el cielo. Esto les dará la fuerza y el ánimo necesarios para seguir adelante en la fe, incluso en los momentos difíciles.