El Evangelio de la relación íntima con Dios: El Nuevo Testamento de Juan - Capítulo 15
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En el capítulo 15 del Evangelio de Juan, Jesús se presenta como la vid verdadera y enseña a sus discípulos la importancia de permanecer en Él para dar fruto como ramas de la vid. También habla del amor que Dios tiene por nosotros, y cómo debemos amarnos los unos a los otros como Él nos amó.
Jesús habla de la relación entre el Padre, Él y los creyentes, y cómo al permanecer en Él y en sus palabras, podemos tener comunión con Dios. También habla del papel del Espíritu Santo en la vida de los creyentes, en el sentido de que Él convencerá al mundo del pecado, la justicia y el juicio.
Jesús menciona que los discípulos serán odiados por el mundo, pero que deben recordar que el mundo los odia porque Él los eligió y los sacó del mundo. También les promete que si piden lo que deseen en su nombre, les será concedido.
En resumen, el capítulo 15 del Evangelio de Juan trata sobre la importancia de permanecer en Cristo y su amor, la comunión con Dios, el papel del Espíritu Santo, la persecución a la que se enfrentan los creyentes y la promesa de Jesús de concederles todo lo que pidan en su nombre.
Pincha en cada uno de los versículos para obterner una explicación más detallada de él.
Joh 15:1 Yo soy la vid verdadera, y mi Padre es el labrador.
Joh 15:1 En este versículo, Jesús se compara a sí mismo con una vid verdadera, que proporciona vida y sustento a sus ramas. El Padre, Dios, es descrito como el labrador que cuida la vid y la hace fructífera. Esta metáfora ilustra la relación que Jesús tiene con sus seguidores, quienes deben permanecer unidos a él para producir frutos espirituales en sus vidas. También muestra la importancia de la labor de Dios en nuestras vidas y cómo él nos provee lo necesario para crecer y prosperar.
Joh 15:2 Todo pámpano que en mí no lleva fruto, lo quitará; y todo aquel que lleva fruto, lo limpiará, para que lleve más fruto.
Joh 15:2 Este versículo se refiere a la relación que existe entre los creyentes y Jesús. Jesús es la vid y los creyentes son los pámpanos que dependen de él para llevar fruto. Si un pámpano no produce fruto, será eliminado, lo cual significa que la persona no es verdaderamente un creyente y no está viviendo de acuerdo con la voluntad de Dios. Sin embargo, aquellos que producen fruto son podados o limpiados para que puedan producir aún más fruto en el futuro. Esto simboliza la necesidad de los creyentes de tener una relación continua y profunda con Jesús, para que puedan seguir creciendo y siendo útiles en su servicio a Dios.
Joh 15:3 Ya vosotros estáis limpios por la palabra que os he hablado.
Joh 15:3 Este versículo significa que al escuchar y creer en las palabras de Jesús, las personas se convierten en limpias y puras. La palabra de Dios tiene el poder de transformar y limpiar el corazón de las personas, y aquellos que aceptan y obedecen las enseñanzas de Jesús son considerados limpios ante los ojos de Dios. La fe en Jesús como Salvador y Señor es la clave para alcanzar la pureza y la salvación.
Joh 15:4 Permaneced en mí, y yo en vosotros. Como el pámpano no puede llevar fruto por sí mismo, si no permanece en la vid, así tampoco vosotros, si no permanecéis en mí.
Joh 15:4 Este versículo es una metáfora que Jesús usó para enseñar a sus discípulos la importancia de mantener una relación íntima con Él. Él es la vid y nosotros somos los pámpanos. El mensaje es claro: si queremos dar fruto en nuestras vidas, necesitamos permanecer en Él. Esto significa mantener una relación diaria con Jesús, estar en comunión con Él, aprender de Él y seguir sus enseñanzas. Es solo a través de esta conexión estrecha con Jesús que podemos vivir una vida fructífera y plena. Sin Él, nuestras vidas serán vacías e infructuosas. Así que permanezcamos en Él, y Él en nosotros, y veremos el fruto que Él produce en nuestras vidas.
Joh 15:5 Yo soy la vid, vosotros los pámpanos; el que permanece en mí, y yo en él, éste lleva mucho fruto; porque separados de mí nada podéis hacer.
Joh 15:5 Este versículo es una metáfora que Jesús usa para ilustrar la relación entre él y los creyentes. Él se compara con una vid, y los creyentes son los pámpanos o ramas que crecen de la vid. El versículo dice que si los creyentes permanecen unidos a Jesús, es decir, si confían en él y siguen sus enseñanzas, entonces producirán mucho fruto. Sin embargo, si se separan de Jesús, no podrán hacer nada por sí mismos. En resumen, el versículo nos anima a mantener una estrecha relación con Jesús, seguir sus enseñanzas y confiar en él para producir frutos de nuestras acciones y una vida plena y significativa.
Joh 15:6 El que en mí no permanece, será echado fuera como pámpano, y se secará; y los recogen, y los echan en el fuego, y arden.
Joh 15:6 Este versículo de la Biblia, específicamente en el evangelio de Juan, habla sobre la relación que debemos tener con Jesucristo. Él se describe como la vid y nosotros somos los pámpanos, es decir, ramas que brotan de la vid. Jesús dice que aquellos que permanecen en Él producirán fruto, pero aquellos que no permanecen en Él se secarán y se cortarán de la vid. Estos pámpanos secos son recogidos y echados en el fuego, lo que simboliza la destrucción eterna por la falta de conexión con Él. En resumen, este versículo es una advertencia de que es necesario permanecer en Jesús para tener una vida fructífera y evitar la condenación eterna.
Joh 15:7 Si permanecéis en mí, y mis palabras permanecen en vosotros, pedid todo lo que queréis, y os será hecho.
Joh 15:7 Este versículo de la Biblia, encontrado en el evangelio de Juan capítulo 15, verso 7, significa que si permanecemos en Jesús, es decir, si estamos unidos a Él y seguimos sus enseñanzas, y sus palabras permanecen en nosotros, es decir, si leemos y meditamos en la Palabra de Dios, entonces podemos pedir cualquier cosa que deseemos y Dios nos la concederá. Esto se debe a que nuestra voluntad se alineará con la voluntad de Dios, y nuestras oraciones serán guiadas por su Espíritu Santo. Sin embargo, es importante señalar que esto no significa que podamos pedir cualquier cosa egoísta o pecaminosa y esperar que Dios la conceda. Nuestras peticiones deben estar en línea con las enseñanzas de Jesús y su voluntad para nuestras vidas.
Joh 15:8 En esto es glorificado mi Padre, en que llevéis mucho fruto, y seáis así mis discípulos.
Joh 15:8 Este versículo significa que cuando los seguidores de Jesús dan mucho fruto, es decir, cuando llevan a cabo las obras y el trabajo que Él les ha encargado, están glorificando a Dios, el Padre. Al ser fieles a sus enseñanzas y vivir según su voluntad, los discípulos de Jesús demuestran su amor y compromiso hacia Él y hacia el reino de Dios, y eso es lo que Dios quiere de sus seguidores. Por lo tanto, el fruto que dan los discípulos de Jesús es una manera de reflejar la gloria y la bondad de Dios en este mundo.
Joh 15:9 Como el Padre me ha amado, así también yo os he amado; permaneced en mi amor.
Joh 15:9 Este versículo es una enseñanza de Jesús a sus discípulos acerca del amor de Dios. Jesús les muestra que el amor que Dios Padre le tiene a él es el mismo amor que Jesús les tiene a ellos. Este amor es incondicional, y es una forma en la que Jesús muestra su compromiso con sus seguidores. Además, Jesús les pide a sus discípulos que permanezcan en él como un símbolo de su amor. Esto significa que ellos deben seguir las enseñanzas de Jesús, obedecer sus mandamientos, y mantener una relación cercana con él. El mensaje de este versículo es que el amor que Dios tiene por nosotros es incomparable y que Jesús nos muestra ese amor a través de su vida y ministerio. Como seguidores de Jesús, debemos mantenernos en su amor, lo que significa mantener una relación cercana con él y demostrar amor a los demás de manera similar a como él lo hizo.
Joh 15:10 Si guardareis mis mandamientos, permaneceréis en mi amor; así como yo he guardado los mandamientos de mi Padre, y permanezco en su amor.
Joh 15:10 Este versículo se encuentra en el capítulo 15 del Evangelio de Juan en el Nuevo Testamento de la Biblia. En este pasaje, Jesús está hablando con sus discípulos y les enseña sobre la importancia de permanecer en su amor. Él les dice que si obedecen sus mandamientos, entonces permanecerán en su amor, de la misma manera que Él ha obedecido los mandamientos de su Padre y permanece en Su amor. Jesús está diciendo que nuestra relación con Él depende de nuestra obediencia a sus mandamientos. Si seguimos sus enseñanzas y vivimos de acuerdo a su voluntad, entonces permaneceremos en su amor y seremos bendecidos por Él. Él también nos recuerda que Él mismo es un ejemplo vivo de obediencia al Padre, y que Su obediencia es la fuente de Su amor y autoridad. En resumen, este versículo nos enseña que la obediencia a los mandamientos de Cristo es la clave para permanecer en su amor y recibir sus bendiciones. Debemos seguir su ejemplo y vivir una vida obediente, amando y sirviendo a Dios con todo nuestro corazón.
Joh 15:11 Estas cosas os he hablado, para que mi gozo esté en vosotros, y vuestro gozo sea cumplido.
Joh 15:11 Este versículo de Juan 15:11 habla sobre la alegría que Jesús desea para sus seguidores. Él les explica que ha compartido estas palabras con ellos para que su alegría esté presente en ellos. Jesús desea que sus seguidores experimenten la plenitud de la alegría que viene de él. A través de su enseñanza y presencia en sus vidas, Jesús espera que puedan encontrar la felicidad y la satisfacción verdaderas. En resumen, Jesús quiere que sus seguidores experimenten la plenitud del gozo divino que viene de su relación con él.
Joh 15:12 Este es mi mandamiento: Que os améis unos a otros, como yo os he amado.
Joh 15:12 Este versículo del Evangelio según San Juan es una instrucción directa de Jesús a sus discípulos. Les está diciendo que el mandamiento más importante que deben seguir es amarse los unos a los otros de la misma manera en que él los ha amado. Jesús dio el ejemplo perfecto del amor: dio su vida por sus amigos, perdonó a sus enemigos y mostró compasión a todos. Por lo tanto, al amarnos mutuamente como Jesús nos amó, estamos siguiendo su ejemplo y también estamos cumpliendo su mandamiento. El amor es fundamental en la vida de los seguidores de Jesús, ya que es a través del amor que se manifiesta la presencia de Dios en el mundo.
Joh 15:13 Nadie tiene mayor amor que este, que uno ponga su vida por sus amigos.
Joh 15:13 Este versículo es una cita de Jesús, quien está hablando con sus discípulos acerca del amor y la amistad. Él les está diciendo que el mayor acto de amor que alguien puede hacer por otro es estar dispuesto a dar su vida por sus amigos. Es decir, si alguien está dispuesto a arriesgar su propia vida por el bienestar de sus amigos, está mostrando una demostración de amor y lealtad extremadamente fuerte. Esta es una idea que se encuentra en muchas religiones y culturas del mundo, y se considera un ideal noble. En el contexto del Nuevo Testamento, donde Jesús dio su propia vida por la salvación de la humanidad, este versículo tiene aún más significado.
Joh 15:14 Vosotros sois mis amigos, si hacéis lo que yo os mando.
Joh 15:14 Este versículo de Juan 15:14 significa que aquellos que obedecen los mandamientos de Jesús son considerados amigos de Jesús. Es una afirmación muy clara de que la amistad de Jesús depende de nuestro compromiso con sus enseñanzas y con su voluntad. Él espera que sus seguidores sean obedientes y vivan según sus mandatos, y este es un requisito indispensable para ser llamado amigo suyo. Para el cristiano, este versículo es un llamado a la obediencia y la lealtad incondicional a Jesús y su evangelio.
Joh 15:15 Ya no os llamaré siervos, porque el siervo no sabe lo que hace su señor; pero os he llamado amigos, porque todas las cosas que oí de mi Padre, os las he dado a conocer.
Joh 15:15 Este versículo es parte del discurso de Jesús a sus discípulos antes de su crucifixión. Él les dice que ya no los llamará siervos, porque un siervo no sabe lo que su señor está haciendo o planeando. En cambio, Jesús los llama amigos, porque les ha revelado todo lo que el Padre le ha hablado. Jesús los está tratando como iguales y les está confiando información vital sobre su misión y enseñanzas. Es una declaración de amor y amistad por parte de Jesús hacia sus discípulos.
Joh 15:16 No me elegisteis vosotros a mí, sino que yo os elegí a vosotros, y os he puesto para que vayáis y llevéis fruto, y vuestro fruto permanezca; para que todo lo que pidiereis al Padre en mi nombre, él os lo dé.
Joh 15:16 Este versículo se refiere a la elección que hizo Jesús de sus discípulos. Él los escogió a ellos y no al revés. Además, los ha puesto para que vayan y produzcan frutos, es decir, que vivan sus vidas de acuerdo a los mandamientos de Dios y lleven su mensaje al mundo. Este fruto, que se refiere a las buenas acciones y la propagación del evangelio, debe permanecer y continuar creciendo, incluso después de que Jesús haya ascendido al cielo. Además, este versículo también habla de la importancia de pedir al Padre en el nombre de Jesús. Si somos sus seguidores y le obedecemos, podemos pedirle al Padre lo que necesitamos en su nombre y Él nos lo concederá. Pero debemos recordar que estas peticiones deben estar en línea con la voluntad de Dios y que nuestro mayor deseo debe ser hacer su voluntad.
Joh 15:17 Esto os mando: Que os améis unos a otros.
Joh 15:17 Jesús está enseñando a sus discípulos y los está preparando para su partida. Les está dando instrucciones importantes para que se mantengan fieles a sus enseñanzas. En este versículo, Jesús les ordena que se amen mutuamente. Es un mandato claro para que se amen unos a otros, y es una de las características fundamentales del cristianismo. Jesús está diciendo que la amor fraterno debe ser una forma de vida entre sus seguidores. Deben ser un ejemplo de amor, paciencia y comprensión mutua, mientras comparten la buena nueva del Reino de Dios. Este mandato sigue siendo relevante hoy en día y los cristianos son llamados a amarse unos a otros en la misma medida en que Jesús amó a los suyos.
Joh 15:18 Si el mundo os aborrece, sabed que a mí me ha aborrecido antes que a vosotros.
Joh 15:18 Este versículo es parte del discurso de Jesús a sus discípulos poco antes de la Última Cena. Él les está diciendo que el mundo los va a odiar por seguirlo a él ya que el mundo también lo odió a él primero. Jesús fue rechazado por su propia gente y por las autoridades religiosas de su tiempo, y los discípulos también esperarían encontrarse con la oposición y la persecución. Sin embargo, Jesús les dice que no tengan miedo ya que él está con ellos y les promete que les enviará al Espíritu Santo para guiarlos y fortalecerlos en su camino. En resumen, este versículo transmite la idea de que seguir a Jesús no será fácil, pero que él está con nosotros y nos sostendrá a través de cualquier adversidad que enfrentemos en el cumplimiento de su voluntad.
Joh 15:19 Si fuerais del mundo, el mundo amaría lo suyo; pero porque no sois del mundo, antes yo os elegí del mundo, por eso el mundo os aborrece.
Joh 15:19 Este versículo significa que si fueras del mundo, es decir, si te adaptaras y adoptaras los valores y creencias del mundo en lugar de seguir las enseñanzas de Jesús, el mundo te amaría y te aceptaría. Pero como los seguidores de Jesús no son del mundo, sino que han sido elegidos y llamados por Él, el mundo los aborrece y los rechaza. Este versículo se refiere a la tensión entre los valores de Dios y los valores del mundo, y muestra que seguir a Jesús a menudo significa ser perseguido e incomprendido por el mundo.
Joh 15:20 Acordaos de la palabra que yo os he dicho: El siervo no es mayor que su señor. Si a mí me han perseguido, también a vosotros os perseguirán; si han guardado mi palabra, también guardarán la vuestra.
Joh 15:20 Este versículo es parte del discurso de Jesús a sus discípulos antes de ser crucificado. Él les está diciendo que deben esperar ser perseguidos y rechazados por aquellos que rechazaron y persiguieron a él. Y, como sus discípulos, no deben esperar un mejor trato que el que recibió Jesús. Jesús está explicando que, siendo sus seguidores, sus discípulos sufrirán persecución en el mundo en el que vivimos. Pero también les está asegurando que, si mantienen su fe y guardan su palabra, serán guardados y protegidos. Les está recordando que él es su maestro, pero también que son sus amigos y que él está con ellos. Por lo tanto, deben seguir sus enseñanzas y confiar en él, incluso en los momentos difíciles.
Joh 15:21 Mas todo esto os harán por causa de mi nombre, porque no conocen al que me ha enviado.
Joh 15:21 Este versículo es parte de un discurso que Jesús dio a sus discípulos poco antes de su crucifixión. Él les estaba advirtiendo que el mundo los odiaría y los perseguiría por su fidelidad a Él y a su enseñanza. El versículo dice que todo el sufrimiento y la adversidad que ellos enfrentarían sería porque el mundo no conocía al Padre que lo había enviado a Él. En otras palabras, la gente que persigue a los seguidores de Jesús lo hace porque no entienden quién es Él o quién envió a Jesús. Por lo tanto, el sufrimiento de los discípulos es un testimonio de la verdad de la enseñanza de Jesús y de la importancia de conocer al Padre correctamente.
Joh 15:22 Si yo no hubiera venido, ni les hubiera hablado, no tendrían pecado; pero ahora no tienen excusa por su pecado.
Joh 15:22 Este versículo es parte de un discurso que Jesús ofreció a sus discípulos poco antes de ser arrestado y crucificado. Aquí, Jesús está hablando sobre la relación entre él, sus enseñanzas y el pecado. Jesús está diciendo que si él no hubiera venido al mundo y enseñado a la gente, ellos no tendrían un conocimiento claro del pecado y su gravedad. En otras palabras, la ignorancia sería una excusa aceptable para sus acciones incorrectas. Sin embargo, ahora que Jesús ha venido y ha hablado con la gente, revelándoles la verdad sobre Dios y la moralidad, ya no pueden usar la ignorancia como excusa. Ellos han sido confrontados con la verdad y ahora deben tomar una decisión consciente de seguir a Dios o no. En resumen, este versículo se refiere a la responsabilidad que tenemos como seres humanos de ser conscientes de lo que es correcto y de lo que no lo es. Jesús nos ofrece su enseñanza y su ejemplo como guía, y debemos tomar esa luz y aplicarla a nuestras vidas.
Joh 15:23 El que me aborrece a mí, también a mi Padre aborrece.
Joh 15:23 Este versículo es una afirmación de Jesús en el Evangelio de Juan, en el que señala que aquellos que lo aborrecen a él, también aborrecen a su Padre celestial. Este pasaje puede interpretarse como una indicación de que rechazar a Jesús es igual a rechazar a Dios, ya que Jesús es el camino hacia Dios. Aquellos que no creen en Jesús o se oponen a él, no pueden tener una relación cercana y personal con Dios. Jesus esta hablando de la relación que los creyentes tienen con Dios y la importancia de tener una fe y una conexión estrecha con el Padre celestial.
Joh 15:24 Si yo no hubiese hecho entre ellos obras que ningún otro ha hecho, no tendrían pecado; pero ahora han visto y han aborrecido a mí y a mi Padre.
Joh 15:24 Este versículo forma parte de un discurso que Jesús dio a sus discípulos antes de su crucifixión. Él les está hablando acerca de la relación que deben tener con él y con Dios, y les está diciendo que si él no hubiera hecho obras milagrosas y demostrado ser el Mesías, los judíos no tendrían pecado por no creer en él. Pero ahora que lo han visto y lo han rechazado, están culpables de pecado. En otras palabras, Jesús está diciendo que él ha hecho todo lo posible para demostrar que es el Hijo de Dios y salvar a la humanidad del pecado, pero incluso después de ver sus milagros y escuchar sus enseñanzas, algunas personas todavía lo rechazan. Por lo tanto, aquellos que rechazan a Jesús y a su mensaje están rechazando a Dios Padre también, y son culpables de pecado.
Joh 15:25 Pero esto es para que se cumpla la palabra que está escrita en su ley: Sin causa me aborrecieron.
Joh 15:25 Este versículo se encuentra dentro de un discurso de Jesús en el cual habla de la relación entre Él y sus seguidores, y cómo deberían permanecer en él para dar frutos espirituales. En este verso en particular, Jesús está citando el Salmo 35:19 y dice que la razón por la cual algunos lo odian sin causa es para que se cumpla la Palabra de Dios, es decir, para que se confirme lo que ya ha sido profetizado. La idea que se transmite es que la gente que odia a Jesús no tiene una razón justificada para hacerlo, sino que lo hacen simplemente porque Él es quien es. Esta negatividad sin causa no es inesperada, sino que ha sido profetizada en las Escrituras. Es importante recordar que estas palabras fueron dichas por Jesús en un momento en que él estaba enfrentando una oposición y rechazo significativo por parte de los líderes religiosos y otros que no estaban dispuestos a creer en él como el Hijo de Dios.
Joh 15:26 Pero cuando venga el Consolador, a quien yo os enviaré del Padre, el Espíritu de verdad, el cual procede del Padre, él dará testimonio acerca de mí.
Joh 15:26 Este versículo hace referencia a la promesa de Jesús de enviar al Espíritu Santo como un apoyo y consolador para los discípulos después de su partida. El Espíritu Santo es el Espíritu de verdad que viene del Padre y que testificará acerca de Jesús. Esto significa que el Espíritu Santo, al habitar en los creyentes, les ayudará a entender y creer en la verdad de quién es Jesús y lo que hizo por nosotros en la cruz. Además, el Espíritu Santo también nos ayudará a vivir de manera santa y a compartir el mensaje de Jesús con otros.
Joh 15:27 Y vosotros daréis testimonio también, porque habéis estado conmigo desde el principio.
Joh 15:27 Este versículo es parte de un discurso que Jesús dio a sus discípulos poco antes de su crucifixión. Él les estaba hablando sobre el Espíritu Santo que vendría después de su partida y les daría poder para dar testimonio de Él. En este versículo en particular, Jesús les dice a sus discípulos que ellos también darán testimonio de Él porque han estado con Él desde el principio de su ministerio. Jesús confía en que sus discípulos seguirán hablando de Él después de que Él se haya ido y que su testimonio ayudará a otros a creer en Él como el Mesías.