Explorando el libro 15 de Lucas: Descubre la sabiduría y el poder de Jesús
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El libro del Nuevo Testamento de Lucas, capítulo 15, se titula “Las tres parábolas perdidas”. Este capítulo contiene tres historias que Jesús contó para enseñar a sus discípulos la importancia de buscar y salvar a los perdidos.
La primera parábola es la del pastor que busca a una oveja perdida. En ella, Jesús compara a un buen pastor que deja su rebaño para buscar a una oveja que se ha extraviado. Cuando la encuentra, la carga en sus hombros y regresa al redil para celebrar con los demás pastores.
La segunda parábola es la de la mujer que busca una moneda perdida. En esta historia, Jesús describe a una mujer que pierde una moneda y la busca con diligencia hasta encontrarla. Cuando la encuentra, llama a sus amigos para celebrar el hallazgo.
La tercera parábola es la del hijo pródigo. En esta historia, Jesús describe a un hijo que pide su parte de la herencia a su padre, la derrocha en un país lejano y se da cuenta de que está en una situación desesperada. Decidido a regresar a casa, el hijo pide perdón a su padre y es recibido con los brazos abiertos y una gran celebración.
En cada una de estas parábolas, Jesús muestra su amor por aquellos que están perdidos, enfermos o necesitados. Él busca incansablemente a aquellos que se han extraviado y ofrece su amor y perdón a todos aquellos que se arrepienten y vuelven a él. Esta enseñanza es fundamental para entender la misericordia y la gracia del Señor, y cómo su amor y salvación están disponibles para todos aquellos que se vuelven a él.
Pincha en cada uno de los versículos para obterner una explicación más detallada de él.
Luk 15:1 Se acercaban a Jesús todos los publicanos y pecadores para oírle,
Luk 15:1 El versículo de Lucas 15:1 describe cómo la gente que en ese momento era considerada como "pecadores" y marginados en la sociedad, tales como los publicanos, comenzaron a acercarse a Jesús para escuchar sus enseñanzas. Este hecho es importante porque muestra que Jesús no se limitaba a predicar solo a una cierta clase de personas, sino que estaba dispuesto a compartir su mensaje con todos, independientemente de su reputación o estatus social. En otras palabras, el versículo sugiere que Jesús acogía a todos aquellos que estaban dispuestos a escucharle y que, a través de sus enseñanzas, buscaba acercarlos a Dios. Este es uno de los muchos ejemplos en los que Jesús se muestra como un líder compasivo y comprensivo, no solo con los que ya lo reconocían como el Mesías, sino también con aquellos que estaban buscando respuestas o eran marginados de la sociedad.
Luk 15:2 y los fariseos y los escribas murmuraban, diciendo: Este a los pecadores recibe, y con ellos come.
Luk 15:2 Este versículo describe que los fariseos y los escribas estaban criticando a Jesús por su voluntad de pasar tiempo con los pecadores y compartir comidas con ellos. Los fariseos y los escribas creían que los pecadores eran indignos de la atención de Dios, y por lo tanto no merecían la atención de un líder religioso. Sin embargo, Jesús mostró un amor y compasión por todos, y estaba dispuesto a pasar tiempo con aquellos que estaban fuera de la religión organizada, lo que generó mucha controversia entre los líderes religiosos de la época.
Luk 15:3 Entonces él les refirió esta parábola, diciendo:
Luk 15:3 Este versículo se encuentra al comienzo de la parábola del pastor que busca a su oveja perdida. Jesús está hablando a un grupo de fariseos y escribas que están murmurando porque Jesús está pasando tiempo con los pecadores y los publicanos. Jesús comienza la parábola diciendo que si alguien tiene cien ovejas, y una se pierde, ¿no dejaría las 99 en el campo y buscaría la que se perdió hasta encontrarla? La idea detrás de este versículo y la parábola es que Dios es como el pastor que busca a su oveja perdida: Él hará todo lo que esté en su poder para encontrar y salvar aquellos que se han alejado de Él. Jesús está tratando de hacer que los fariseos y escribas vean que deben amar y buscar a los que consideran pecadores, en lugar de juzgarlos y alejarse de ellos. Es una lección sobre el amor incondicional de Dios y su deseo de salvar a todos los que se han alejado de Él.
Luk 15:4 ¿Qué hombre de vosotros, teniendo cien ovejas, si pierde una de ellas, no deja las noventa y nueve en el desierto, y va tras la que se perdió, hasta encontrarla?
Luk 15:4 Este versículo es una parábola que Jesús utilizó para explicar el amor y la misericordia de Dios hacia los pecadores. La parábola dice que si un pastor tiene cien ovejas y pierde una de ellas, él dejará las otras noventa y nueve en un lugar seguro y buscará diligentemente la oveja perdida hasta encontrarla. Esto indica que Dios busca y ama a cada persona individualmente, incluso a aquellos que parecen estar perdidos o alejados de Él. La parábola también nos anima a valorar cada vida y a seguir el ejemplo de Dios al amar a aquellos que han perdido su camino.
Luk 15:5 Y cuando la encuentra, la pone sobre sus hombros gozoso;
Luk 15:5 Este versículo es parte de la parábola del pastor que perdió una de sus cien ovejas y la busca incansablemente hasta que la encuentra. Cuando finalmente encuentra a la oveja perdida, el pastor la pone sobre sus hombros y regresa a casa con gran alegría. Este pasaje muestra la gran compasión y el amor de Dios por sus hijos, incluso cuando se pierden o se desvían del camino correcto. Al igual que el pastor que busca su oveja perdida, Dios busca a cada persona que se ha alejado de él y está dispuesto a cargarlos sobre sus hombros y guiarlos hacia su camino correcto. También se enfatiza la gran alegría y celebración que hay en el cielo cuando uno de los perdidos es encontrado y regresa a casa.
Luk 15:6 y al llegar a casa, reúne a sus amigos y vecinos, diciéndoles: Gozaos conmigo, porque he encontrado mi oveja que se había perdido.
Luk 15:6 Este versículo es parte de una parábola que Jesús contó acerca de un pastor que tenía un rebaño de ovejas. Una de las ovejas se perdió y el pastor salió en busca de ella, dejando las otras 99 en el campo. Después de buscarla con ahínco, finalmente la encontró y la llevó de vuelta al rebaño. Cuando el pastor regresó a casa, llamó a sus amigos y vecinos para compartir la buena noticia de que había encontrado la oveja perdida. Esta celebración muestra la importancia que tiene para Dios cada uno de nosotros, independientemente de si hemos sido fieles o no, y cómo Él se alegra cuando nos encontramos de nuevo en su rebaño. En resumen, este versículo nos habla de la alegría que se siente al encontrar algo perdido y cómo se debe compartir esta alegría con los demás para que se sientan parte de ella.
Luk 15:7 Os digo que así habrá más gozo en el cielo por un pecador que se arrepiente, que por noventa y nueve justos que no necesitan de arrepentimiento.
Luk 15:7 Este versículo es parte de una parábola de Jesús en la que un pastor pierde una oveja del rebaño y la busca, encontrándola finalmente. Cuando la encuentra, está muy contento y llama a sus amigos y vecinos para celebrar con él porque ha encontrado su oveja perdida. Jesús está enseñando que cuando alguien se arrepiente de sus pecados y regresa a Dios, hay mucha alegría en el cielo. Aunque los noventa y nueve justos (las ovejas que no se han perdido) no necesiten arrepentirse, la alegría es mayor por aquel que se arrepiente y vuelve a Dios. En resumen, este versículo nos enseña que Dios se alegra cuando alguien se arrepiente de sus pecados y vuelve a él, incluso más que por aquellos que han sido fieles todo el tiempo.
Luk 15:8 ¿O qué mujer que tiene diez dracmas, si pierde una dracma, no enciende la lámpara, y barre la casa, y busca con diligencia hasta encontrarla?
Luk 15:8 Este versículo se encuentra en una parábola que Jesús contó acerca de la misericordia de Dios. En la parábola, una mujer tiene diez dracmas y pierde una. Ella enciende una lámpara y barre su casa con diligencia para encontrar la moneda perdida. La parábola se refiere a la importancia de cada persona para Dios, que busca y se preocupa por el bienestar de cada individuo. La mujer en la historia representa a Dios, que busca a aquellos que se han perdido o alejado de él. Así, a través de este versículo, Jesús muestra la importancia de buscar y encontrar lo perdido, tanto en términos de objetos materiales como en términos de almas humanas.
Luk 15:9 Y cuando la encuentra, reúne a sus amigas y vecinas, diciendo: Gozaos conmigo, porque he encontrado la dracma que había perdido.
Luk 15:9 Este versículo es parte de una parábola que Jesús contó sobre una mujer que perdió una moneda de plata (también conocida como una dracma), la cual puso en búsqueda hasta encontrarla. En este versículo, Jesús nos muestra la reacción de la mujer al encontrar la moneda perdida; ella llama a sus amigos y vecinos para celebrar con ella y regocijarse por haber encontrado lo que había perdido. Esta parábola representa la importancia de cada persona individual y cómo Dios se preocupa por encontrar y salvar a cada una de ellas.
Luk 15:10 Así os digo que hay gozo delante de los ángeles de Dios por un pecador que se arrepiente.
Luk 15:10 Este versículo es parte de una parábola que Jesús contó sobre un pastor que se alegra cuando encuentra una oveja perdida y la lleva de regreso al rebaño. Jesús usó esta historia para mostrar que Dios se preocupa por las personas perdidas y que hay alegría en el cielo cuando alguien se arrepiente de sus pecados y vuelve a Dios. El versículo específicamente dice que hay "gozo delante de los ángeles de Dios" cuando alguien se arrepiente. Esto significa que los ángeles celebran y se regocijan cuando una persona se convierte y abandona su camino pecaminoso. Es una hermosa imagen de la alegría y el amor que Dios y los ángeles tienen por cada individuo, sin importar cuán perdido pueda parecer.
Luk 15:11 También dijo: Un hombre tenía dos hijos;
Luk 15:11 Este versículo es el inicio de una parábola que Jesús contó, conocida como la parábola del hijo pródigo. La parábola trata sobre un hombre que tenía dos hijos, y cómo uno de ellos decide pedir su herencia antes de tiempo y gastarla en una vida disipada en el extranjero, mientras que el otro hijo se queda en casa y trabaja fielmente para su padre. El versículo es simplemente la introducción a la historia que sigue.
Luk 15:12 y el menor de ellos dijo a su padre: Padre, dame la parte de los bienes que me corresponde; y les repartió los bienes.
Luk 15:12 Este versículo se refiere a la parábola del hijo pródigo contada por Jesús. En la historia, el hijo menor le pide a su padre su parte de la herencia. El padre cumple la petición y le da la parte que le corresponde al hijo. Luego, el hijo se marcha y gasta su fortuna en una vida de disipación. Esta parábola representa la naturaleza del pecado y la redención en la vida cristiana. Muestra cómo, aunque podemos alejarnos de Dios, siempre hay una oportunidad de arrepentirse y volver a Él para recibir su amor y misericordia. El padre de la historia representa a Dios, que nos ama incondicionalmente y está esperando pacientemente por nosotros, incluso cuando nos alejamos de Él. En resumen, este versículo es un ejemplo de la parábola del hijo pródigo y nos hace reflexionar sobre la importancia de estar cerca de Dios y reconocer nuestra necesidad de Él en nuestras vidas.
Luk 15:13 No muchos días después, juntándolo todo el hijo menor, se fue lejos a una provincia apartada; y allí desperdició sus bienes viviendo perdidamente.
Luk 15:13 Este versículo del Evangelio de Lucas, capítulo 15, habla de la parábola del hijo pródigo. El hijo menor de un padre rico pide su herencia antes de tiempo y se va a una tierra lejana, donde gasta todo el dinero en una vida disoluta y extravagante. Esto ilustra la naturaleza humana de ser imprudente y egoísta, y cómo nuestras decisiones pueden llevarnos a una verdadera ruina. La historia también destaca el amor incondicional del padre, quien finalmente recibe al hijo de regreso con brazos abiertos. La historia es un llamado a la compasión, el arrepentimiento y el perdón.
Luk 15:14 Y cuando todo lo hubo malgastado, vino una gran hambre en aquella provincia, y comenzó a faltarle.
Luk 15:14 Este versículo forma parte de la parábola del hijo pródigo contada por Jesús en el Evangelio de Lucas. El hijo pródigo es un joven que pide a su padre que le dé su herencia para gastarla en placeres mundanos. Después de malgastar todo su dinero en una vida de excesos, el joven se encuentra en una provincia lejana en medio de una gran hambruna. Comienza a faltarle la comida y se encuentra en una situación difícil y necesitada. Este versículo y la parábola en su conjunto enseñan sobre la importancia de valorar las bendiciones que tenemos y usarlas sabiamente. También muestra cómo nuestras decisiones pueden llevarnos por caminos equivocados y situaciones difíciles, y nos recuerda que siempre hay oportunidades para pedir ayuda y arrepentirnos.
Luk 15:15 Y fue y se arrimó a uno de los ciudadanos de aquella tierra, el cual le envió a su hacienda para que apacentase cerdos.
Luk 15:15 Este versículo describe a un hijo pródigo que había gastado toda su herencia y estaba en una situación desesperada. Para sobrevivir, se acercó a un ciudadano de la tierra que le ofreció trabajo como cuidador de cerdos en su hacienda. Esto era un trabajo poco honorable para un judío, ya que los cerdos eran considerados animales impuros según la ley judía. La intención del versículo es mostrar la humildad y desesperación del hijo pródigo, dispuesto a hacer cualquier trabajo para sobrevivir.
Luk 15:16 Y deseaba llenar su vientre de las algarrobas que comían los cerdos, pero nadie le daba.
Luk 15:16 Este versículo está hablando de la historia del hijo pródigo, que derrochó toda su herencia en una vida de excesos y después de haber tocado fondo, decide volver a casa de su padre. En este punto de la historia, el hijo ha perdido todo y está en una situación precaria, donde hasta desearía comer lo mismo que los cerdos. Este versículo es una muestra de la humillación y la desesperación que el hijo pródigo está sintiendo en ese momento. Además, también destaca la falta de compasión de aquellos que lo rodean y no le dan ayuda. En resumen, este versículo es un recordatorio de cómo podemos caer en momentos difíciles y cómo necesitamos el apoyo y la ayuda de los demás para salir adelante.
Luk 15:17 Y volviendo en sí, dijo: ¡Cuántos jornaleros en casa de mi padre tienen abundancia de pan, y yo aquí perezco de hambre!
Luk 15:17 Este versículo se encuentra en la parábola del hijo pródigo, en la que un hijo le pide a su padre su parte de la herencia y la malgasta en una vida de excesos. Después de haber perdido todo, el hijo cae en la pobreza y comienza a trabajar en un campo de cerdos. Es entonces cuando se da cuenta de su error y regresa a su casa arrepentido. En este versículo en particular, el hijo pródigo se da cuenta de que incluso los jornaleros en la casa de su padre tienen más que suficiente pan para comer, mientras que él está muriendo de hambre en el campo de cerdos en el que trabaja. Este verso nos muestra la humildad y el arrepentimiento del hijo pródigo al darse cuenta de que había perdido todo lo que tenía y de que sólo su padre podría salvarlo. También nos habla de la generosidad del padre, que estaba dispuesto a recibir de nuevo a su hijo pródigo y perdonarle sus errores. Es una lección de humildad, arrepentimiento y perdón que puede aplicarse a nuestras propias vidas.
Luk 15:18 Me levantaré e iré a mi padre, y le diré: Padre, he pecado contra el cielo y contra ti.
Luk 15:18 Este versículo pertenece a la parábola del "Hijo Pródigo", contada por Jesús para ilustrar el amor y la misericordia de Dios hacia aquellos que se alejan de su camino y luego regresan a él. En este pasaje, el hijo pródigo, después de haber derrochado su herencia y vivido en la pobreza, se da cuenta de sus errores y decide volver a su casa y pedir perdón a su padre. Él reconoce su pecado y se arrepiente sinceramente de haberlo cometido, y está dispuesto a hacer lo que sea necesario para reparar su relación con su padre. Este versículo muestra la humildad del hijo pródigo al reconocer su culpa y buscar la reconciliación. Es un recordatorio de que, independientemente de nuestras fallas, siempre podemos regresar a Dios y pedir su perdón y restauración.
Luk 15:19 Ya no soy digno de ser llamado tu hijo; hazme como a uno de tus jornaleros.
Luk 15:19 Este versículo es parte de la famosa parábola del hijo pródigo, en la que un hijo le pide a su padre su parte de la herencia y se va a gastarlo todo en una vida de excesos, pero termina en la miseria y vuelve arrepentido a casa. En este versículo en particular, el hijo pródigo está hablando con su padre, expresando su profundo arrepentimiento y humildad ante su comportamiento pasado. Él se da cuenta de que ha fallado gravemente como hijo y ya no se siente digno de ser llamado así. En cambio, pide al padre que lo trate como a uno de sus jornaleros, lo que significa que está dispuesto a trabajar duro y humildemente para ganarse el perdón y la aceptación de su padre. En resumen, este versículo muestra el poder del arrepentimiento genuino y la humildad al pedir perdón y buscar reconciliación en las relaciones rotas.
Luk 15:20 Y levantándose, vino a su padre. Y cuando aún estaba lejos, lo vio su padre, y fue movido a misericordia, y corrió, y se echó sobre su cuello, y le besó.
Luk 15:20 Este versículo es parte de la parábola del hijo pródigo, en la cual un joven pide su parte de la herencia a su padre y luego abandona su hogar para gastar todo su dinero en una vida de libertinaje. Después de perder todo el dinero y vivir una vida de miseria, el hijo regresa a casa arrepentido, dispuesto a hacer cualquier cosa para recuperar el favor de su padre. En este versículo, el hijo pródigo se levanta y regresa a su padre. Aunque todavía estaba lejos, su padre lo ve y corre hacia él en una muestra de misericordia y amor. El padre se echa sobre el cuello de su hijo y lo besa, señalando su disposición para perdonar y volver a recibir a su hijo en su hogar. Este versículo muestra la bondad y el amor de un padre que está dispuesto a aceptar a su hijo pródigo de regreso, incluso después de haber cometido errores. También sugiere que Dios es como este padre, siempre dispuesto a perdonar y mostrar misericordia a aquellos que vuelven a Él arrepentidos.
Luk 15:21 Y el hijo le dijo: Padre, he pecado contra el cielo y contra ti, y ya no soy digno de ser llamado tu hijo.
Luk 15:21 Este versículo habla de la Parábola del Hijo Pródigo, la cual cuenta la historia de un hijo que le pide a su padre su parte de la herencia y se va a gastar todo el dinero en placeres y excesos. Cuando se queda sin dinero y cae en desgracia, regresa a su casa y pide perdón a su padre por haberlo ofendido y por no haber honrado su nombre. El hijo reconoce su error, se arrepiente de sus actos y se presenta ante su padre con humildad, diciendo que ya no se siente merecedor de seguir siendo su hijo. En resumen, este versículo habla de la necesidad del arrepentimiento sincero y de la importancia de pedir perdón a Dios y cerrar las heridas en la relación con nuestros seres queridos.
Luk 15:22 Pero el padre dijo a sus siervos: Sacad el mejor vestido, y vestidle; y poned un anillo en su mano, y calzado en sus pies.
Luk 15:22 Este verso es parte de la parábola del Hijo Pródigo contada por Jesús en el evangelio de Lucas. En la historia, un hijo le pide a su padre su herencia antes de tiempo y se va lejos para gastar todo el dinero en placeres y lujos. Cuando se queda sin dinero y se encuentra en una situación difícil, decide volver a su casa y pedir perdón a su padre. En este verso, el padre se alegra al ver que su hijo ha vuelto a casa y da instrucciones a sus siervos para que le traigan el mejor vestido, le pongan un anillo en su mano y le den calzado en sus pies. Estos gestos simbolizan la restauración de la dignidad y la posición del hijo en la familia. El padre muestra su amor incondicional al hijo y lo recibe con alegría, incluso después de haberle desobedecido y desperdiciado su dinero. Es una muestra de la gracia de Dios y su disposición a perdonar a los que se arrepienten y vuelven a Él.
Luk 15:23 Y traed el becerro gordo y matadlo, y comamos y hagamos fiesta;
Luk 15:23 Este versículo es parte de la parábola del hijo pródigo contada por Jesús. En la parábola, un hijo abandona a su padre y dilapida su fortuna en pecados. Al darse cuenta de su error, regresa a casa y es recibido con gran alegría por su padre. En este versículo, el padre ordena matar un becerro gordo para celebrar la vuelta de su hijo perdido. Esto simboliza la generosidad y la abundancia de la bendición que el padre quiere mostrar a su hijo. La fiesta es una metáfora para la felicidad y la alegría que sintió el padre por el regreso de su hijo. En general, este versículo habla de la importancia de la celebración a través de la comida y la reunión familiar en momentos de alegría y felicidad. También se puede interpretar como una invitación a la generosidad y la compasión hacia aquellos que han cometido errores.
Luk 15:24 porque este mi hijo muerto era, y ha revivido; se había perdido, y es hallado. Y comenzaron a regocijarse.
Luk 15:24 Este versículo se encuentra en la parábola del hijo pródigo en el libro de Lucas, capítulo 15. La historia trata sobre un hijo que deja a su padre y utiliza su herencia para vivir una vida de excesos y desperdicio. Eventualmente se queda sin dinero y se ve obligado a trabajar en un trabajo humilde y degradante. Después de darse cuenta de su error, regresa a casa de su padre y pide perdón. En lugar de rechazarlo, su padre lo recibe con los brazos abiertos y celebra su regreso. Este versículo en particular es una expresión de la alegría que experimentan el padre y su familia después del regreso del hijo pródigo. La frase "este mi hijo muerto era, y ha revivido" se refiere a la idea de que el hijo había estado muerto en cuanto a la relación con su padre, pero ahora ha sido restaurado a la vida y la familia. "Se había perdido, y es hallado" se refiere a la idea de que el hijo había estado perdido en el sentido de que había abandonado su hogar y su familia, pero ahora había sido encontrado y había regresado. En general, este versículo celebra la idea de que el perdón y la reconciliación son posibles, incluso en situaciones en las que parece que no hay esperanza. La parábola del hijo pródigo es una historia de amor, perdón y redención, y este versículo es un momento de absoluta felicidad después de un período de tristeza y separación.
Luk 15:25 Y su hijo mayor estaba en el campo; y cuando vino, y llegó cerca de la casa, oyó la música y las danzas;
Luk 15:25 Este versículo es parte de la famosa parábola del hijo pródigo, que cuenta la historia de un hijo que pide su herencia por adelantado y la malgasta en una vida licenciosa, para luego arrepentirse y ser recibido de vuelta por su padre. En este versículo específico, se menciona que el hijo mayor (que no había abandonado a su padre) estaba en el campo trabajando cuando escuchó música y danzas cerca de la casa. Este detalle muestra que había una gran celebración en honor al hijo perdido que regresó, lo que causa un poco de resentimiento en el hermano mayor al sentir que no había recibido tanta atención y celebración a pesar de su lealtad. En resumen, este versículo muestra un punto importante en la historia: la reconciliación del hijo perdido es causa de alegría y celebración.
Luk 15:26 y llamando a uno de los criados, le preguntó qué era aquello.
Luk 15:26 Este versículo es parte de una parábola contada por Jesús acerca de un hijo pródigo que regresa a la casa de su padre después de malgastar su herencia. En este punto de la historia, el hijo ha regresado y el padre ha ordenado una fiesta en su honor. El hermano mayor, sin embargo, está enojado y no quiere unirse a la fiesta. El versículo en cuestión menciona que el padre llama a uno de sus criados y le pregunta qué está sucediendo. Es posible que quisiera saber si algo había ocurrido entre su hijo y su hermano que pudiera haber causado el enfado. Además, el padre puede estar buscando una manera de reconciliar a los dos hermanos. La respuesta del criado no se menciona en este pasaje, pero el resto de la parábola da a entender que el padre trata de reconciliar a sus hijos y celebrar la vuelta del hijo pródigo.
Luk 15:27 El le dijo: Tu hermano ha venido; y tu padre ha hecho matar el becerro gordo, por haberle recibido bueno y sano.
Luk 15:27 Este versículo es parte de la parábola del Hijo Pródigo en la que Jesús está contando la historia de un hijo que se fue de casa y regresó después de haber gastado todo su dinero. En este versículo, el hermano mayor del hijo pródigo se enoja porque su padre ha matado un becerro gordo para celebrar el regreso de su hermano y le dice al padre que nunca le ha hecho algo así por él. El padre le responde diciendo que su hermano estuvo perdido y ahora ha sido encontrado, y que deben celebrar su regreso. Este versículo enfatiza la importancia del perdón y la generosidad, incluso cuando a veces parezca injusto.
Luk 15:28 Entonces se enojó, y no quería entrar. Salió por tanto su padre, y le rogaba que entrase.
Luk 15:28 Este versículo se encuentra dentro de la parábola del hijo pródigo, que cuenta la historia de un hijo que abandona a su padre y derrocha toda su herencia en vicios y placeres. Después de quedar en la ruina, el hijo regresa a su hogar y es recibido con los brazos abiertos por su padre, quien organiza una gran fiesta para celebrar su regreso. En este versículo en particular, se hace referencia al hijo mayor, quien estaba enojado porque su padre había organizado esta gran celebración para su hermano menor. Él no quería entrar a la fiesta y se quedó afuera, pero su padre salió y le rogó que se uniera a ellos para festejar. El mensaje detrás de este versículo es que el amor y la misericordia del padre son infinitos y alcanzan a todos, incluso a aquellos que puedan sentirse marginados o desplazados. También se destaca la importancia del perdón y la reconciliación, incluso en situaciones difíciles y dolorosas.
Luk 15:29 Mas él, respondiendo, dijo al padre: He aquí, tantos años te sirvo, no habiéndote desobedecido jamás, y nunca me has dado ni un cabrito para gozarme con mis amigos.
Luk 15:29 En este versículo, el hijo mayor de la parábola del Hijo Pródigo está hablando con su padre y expresando su frustración de que nunca ha recibido una celebración o recompensa por su lealtad y obediencia. Él siente que su padre ha sido injusto al no darle al menos un pequeño regalo para compartir con sus amigos, mientras que su hermano menor, quien malgastó su herencia, fue recibido con una gran fiesta cuando regreso. El hijo mayor puede sentir que sus esfuerzos y su dedicación han sido ignorados y menospreciados por su padre. Este versículo nos enseña sobre la importancia de reconocer y valorar a aquellos que han sido leales y han servido fielmente durante muchos años.
Luk 15:30 Pero cuando vino este tu hijo, que ha consumido tus bienes con rameras, has hecho matar para él el becerro gordo.
Luk 15:30 Este versículo es parte de la conocida parábola del Hijo Pródigo, en la que Jesús cuenta la historia de un joven que pide a su padre su herencia por adelantado, se marcha de casa y desperdicia todo su dinero. Cuando el hijo se encuentra en la miseria, decide regresar a casa arrepentido, donde su padre lo recibe con los brazos abiertos y lo celebra con una fiesta. En este versículo en particular, el hijo mayor, que nunca había hecho nada malo y siempre había trabajado fielmente para su padre, se siente enojado por la celebración que se está llevando a cabo para su hermano menor, que ha despilfarrado el dinero de su padre. Por eso, le reprocha que haya matado al becerro gordo para la fiesta de su hermano, a pesar de haber "consumido tus bienes con rameras", es decir, de haber gastado su dinero en mujeres. Este versículo muestra el resentimiento del hijo mayor hacia su hermano y revela cómo Jesús quería enseñar que Dios perdona los pecados a los arrepentidos, sin importar cuánto hayan pecado o cuán lejos hayan caído. También muestra cómo la envidia y el resentimiento pueden surgir incluso en aquellos que han sido fieles y trabajadores, y la necesidad de dejar atrás esas emociones negativas para celebrar la gracia y la misericordia de Dios.
Luk 15:31 El entonces le dijo: Hijo, tú siempre estás conmigo, y todas mis cosas son tuyas.
Luk 15:31 Este versículo es parte de la parábola del hijo pródigo contada por Jesús en Lucas 15. La parábola describe a un hijo que deja a su padre y su casa para vivir una vida de pecado y excesos. Pero cuando el hijo se arrepiente y regresa a su padre, este lo recibe con los brazos abiertos y celebra su regreso con una gran fiesta. El versículo en cuestión es una respuesta del padre al hermano mayor del hijo pródigo, quien se siente resentido porque su padre ha celebrado el regreso del hermano menor. En su respuesta, el padre le recuerda al hijo mayor que él siempre ha estado con él y que todo lo que tiene es suyo. El padre busca tranquilizar al hijo mayor y recordarle que su amor y sus bendiciones no son exclusivas para el hijo menor, sino que también le pertenecen a él. El versículo nos enseña la importancia del amor incondicional y la generosidad de Dios hacia todos sus hijos.
Luk 15:32 Mas era necesario hacer fiesta y regocijarnos, porque este tu hermano era muerto, y ha revivido; se había perdido, y es hallado.
Luk 15:32 Este versículo forma parte de la conocida parábola del hijo pródigo. En la historia, el hijo menor de un hombre rico pide su herencia por adelantado y se va lejos para gastarla en una vida de pecado y vicio. Cuando se queda sin dinero y recursos, decide volver a casa con su padre y pedir su perdón. En este versículo, el padre habla con el hijo mayor, quien se enoja porque su hermano menor recibió una gran bienvenida y celebración en su regreso. El padre responde que era necesario hacer una fiesta y regocijarse porque su hijo menor había muerto en su persona anterior de pecado y ahora había vuelto a la vida a través del perdón y la reconciliación. Además, había estado perdido y ahora había sido encontrado y restaurado a la familia. En resumen, esto significa que Dios siempre nos espera con los brazos abiertos y está dispuesto a celebrar cuando volvemos a Él después de haber estado perdidos y muertos en nuestros pecados.