Explorando las enseñanzas del Libro 17 de Lucas: Un viaje de fe y reflexión en el Nuevo Testamento


El Capítulo 17 del Evangelio según Lucas cuenta varias enseñanzas importantes que Jesús les brinda a sus discípulos. Primero les habla sobre la tentación y les insta a que se alejen de ella ya que siempre estará presente en sus vidas. Luego, les habla sobre cómo deben tratar a aquellos que pecan y les insta a que siempre perdonen a sus hermanos y hermanas en Cristo. Posteriormente, Jesús cura a diez leprosos en una aldea, pero solo uno de ellos, un samaritano, regresa para agradecerle. Esto le sirve a Jesús como ejemplo para hacerles notar a sus discípulos la importancia de demostrar gratitud y reconocimiento. Más adelante, los fariseos le preguntan a Jesús sobre el reino de Dios y él les explica que este no llegaría con señales externas, sino que ya estaba entre ellos. Además, les advierte que el tiempo del Hijo del Hombre también llegará de manera inesperada y, por lo tanto, deben estar preparados. Finalmente, Jesús les da a conocer que la entrada al reino de Dios no se dará por medio de señales espectaculares, sino que será un proceso que requerirá el constante arrepentimiento y preparación. Es así como el Capítulo 17 del Evangelio según Lucas deja varias lecciones importantes para todos aquellos que buscan seguir a Jesucristo.

Pincha en cada uno de los versículos para obterner una explicación más detallada de él.

Luk 17:1 Dijo Jesús a sus discípulos: Imposible es que no vengan tropiezos; mas ¡ay de aquel por quien vienen!
Luk 17:2 Mejor le fuera que se le atase al cuello una piedra de molino y se le arrojase al mar, que hacer tropezar a uno de estos pequeñitos.
Luk 17:3 Mirad por vosotros mismos. Si tu hermano pecare contra ti, repréndele; y si se arrepintiere, perdónale.
Luk 17:4 Y si siete veces al día pecare contra ti, y siete veces al día volviere a ti, diciendo: Me arrepiento; perdónale.
Luk 17:5 Dijeron los apóstoles al Señor: Auméntanos la fe.
Luk 17:6 Entonces el Señor dijo: Si tuvierais fe como un grano de mostaza, podríais decir a este sicómoro: Desarráigate, y plántate en el mar; y os obedecería.
Luk 17:7 ¿Quién de vosotros, teniendo un siervo que ara o apacienta ganado, al volver él del campo, luego le dice: Pasa, siéntate a la mesa?
Luk 17:8 ¿No le dice más bien: Prepárame la cena, cíñete, y sírveme hasta que haya comido y bebido; y después de esto, come y bebe tú?
Luk 17:9 ¿Acaso da gracias al siervo porque hizo lo que se le había mandado? Pienso que no.
Luk 17:10 Así también vosotros, cuando hayáis hecho todo lo que os ha sido ordenado, decid: Siervos inútiles somos, pues lo que debíamos hacer, hicimos.
Luk 17:11 Yendo Jesús a Jerusalén, pasaba entre Samaria y Galilea.
Luk 17:12 Y al entrar en una aldea, le salieron al encuentro diez hombres leprosos, los cuales se pararon de lejos
Luk 17:13 y alzaron la voz, diciendo: ¡Jesús, Maestro, ten misericordia de nosotros!
Luk 17:14 Cuando él los vio, les dijo: Id, mostraos a los sacerdotes. Y aconteció que mientras iban, fueron limpiados.
Luk 17:15 Entonces uno de ellos, viendo que había sido sanado, volvió, glorificando a Dios a gran voz,
Luk 17:16 y se postró rostro en tierra a sus pies, dándole gracias; y éste era samaritano.
Luk 17:17 Respondiendo Jesús, dijo: ¿No son diez los que fueron limpiados? Y los nueve, ¿dónde están?
Luk 17:18 ¿No hubo quien volviese y diese gloria a Dios sino este extranjero?
Luk 17:19 Y le dijo: Levántate, vete; tu fe te ha salvado.
Luk 17:20 Preguntado por los fariseos, cuándo había de venir el reino de Dios, les respondió y dijo: El reino de Dios no vendrá con advertencia,
Luk 17:21 ni dirán: Helo aquí, o helo allí; porque he aquí el reino de Dios está entre vosotros.
Luk 17:22 Y dijo a sus discípulos: Tiempo vendrá cuando desearéis ver uno de los días del Hijo del Hombre, y no lo veréis.
Luk 17:23 Y os dirán: Helo aquí, o helo allí. No vayáis, ni los sigáis.
Luk 17:24 Porque como el relámpago que al fulgurar resplandece desde un extremo del cielo hasta el otro, así también será el Hijo del Hombre en su día.
Luk 17:25 Pero primero es necesario que padezca mucho, y sea desechado por esta generación.
Luk 17:26 Como fue en los días de Noé, así también será en los días del Hijo del Hombre.
Luk 17:27 Comían, bebían, se casaban y se daban en casamiento, hasta el día en que entró Noé en el arca, y vino el diluvio y los destruyó a todos.
Luk 17:28 Asimismo como sucedió en los días de Lot; comían, bebían, compraban, vendían, plantaban, edificaban;
Luk 17:29 mas el día en que Lot salió de Sodoma, llovió del cielo fuego y azufre, y los destruyó a todos.
Luk 17:30 Así será el día en que el Hijo del Hombre se manifieste.
Luk 17:31 En aquel día, el que esté en la azotea, y sus bienes en casa, no descienda a tomarlos; y el que en el campo, asimismo no vuelva atrás.
Luk 17:32 Acordaos de la mujer de Lot.
Luk 17:33 Todo el que procure salvar su vida, la perderá; y todo el que la pierda, la salvará.
Luk 17:34 Os digo que en aquella noche estarán dos en una cama; el uno será tomado, y el otro será dejado.
Luk 17:35 Dos mujeres estarán moliendo juntas; la una será tomada, y la otra dejada.
Luk 17:36 Dos estarán en el campo; el uno será tomado, y el otro dejado.
Luk 17:37 Y respondiendo, le dijeron: ¿Dónde, Señor? El les dijo: Donde estuviere el cuerpo, allí se juntarán también las águilas.

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