La Revelación Final: Explorando el Apocalipsis del Libro 22 del Nuevo Testamento
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El libro del Nuevo Testamento del Apocalipsis es el último libro del canon bíblico cristiano y compuesto por 22 capítulos. Este libro describe una visión profética del apóstol Juan, quien en una isla llamada Patmos recibe una revelación de Jesucristo. La visión muestra los eventos futuros que se desarrollarán antes del regreso de Cristo a la Tierra. El Apocalipsis es una obra literaria altamente simbólica y es interpretada de diferentes maneras según las creencias de cada denominación.
El libro comienza con una introducción en la que Juan presenta su autoría y describe como recibió esta visión del Hijo del Hombre. Después, el libro se divide en 3 partes principales:
1. Los Siete Sellos: los primeros cuatro sellos representan los jinetes del Apocalipsis, que simbolizan la guerra, la hambruna, la peste y la muerte. Los siguientes tres sellos muestran la llegada del fin de los tiempos.
2. Las Siete Trompetas: la apertura de las siete trompetas representa la venida de una plaga desde el cielo y el inicio del Juicio Final.
3. El Fin del Mundo: en esta sección se habla del surgimiento de una bestia con siete cabezas, la marca de la bestia, el número 666 y la llegada de la Nueva Jerusalén.
En general, el Apocalipsis describe importantes eventos cósmicos y espirituales que llevarán a la victoria final del pueblo de Dios sobre el mal y Satanás. Este libro se considera una herramienta de motivación y esperanza para los cristianos, ya que revela el gran amor y poder de Dios y la promesa de un futuro glorioso en Su presencia.
Pincha en cada uno de los versículos para obterner una explicación más detallada de él.
Rev 22:1 Después me mostró un río limpio de agua de vida, resplandeciente como cristal, que salía del trono de Dios y del Cordero.
Rev 22:1 Este verso se encuentra en la última parte del libro de Apocalipsis, que es el último libro del Nuevo Testamento en la Biblia. La visión que Juan, el autor del libro, describe en este verso es de un río de agua limpia que fluye del trono de Dios y del Cordero, que simboliza la fuente de vida y bendición que emana de Dios mismo. El río representa la provisión divina de vida y prosperidad para todas las cosas vivas. El agua limpia y clara es una metáfora de la pureza y santidad de Dios, que fluye de su trono para brindar vida a todas las criaturas de la tierra. El hecho de que el río sea "resplandeciente como cristal" sugiere que esta agua es pura e incandescente, iluminando todo lo que toca. En resumen, este versículo es una poderosa imagen de la fuente divina de vida y bendición que fluye de Dios hacia nosotros, simbolizado por un río que nunca se seca ni se contamina. La invitación a beber de esta agua representa la invitación a recibir la vida eterna y la transformación que solo se puede encontrar en Dios.
Rev 22:2 En medio de la calle de la ciudad, y a uno y otro lado del río, estaba el árbol de la vida, que produce doce frutos, dando cada mes su fruto; y las hojas del árbol eran para la sanidad de las naciones.
Rev 22:2 Este versículo describe la visión de Juan del paraíso celestial. Él ve una ciudad con un río en medio. A lo largo del río, hay un árbol de la vida que da doce diferentes tipos de frutas, una cada mes. Las hojas del árbol tienen propiedades curativas y son para la sanidad de las naciones. Este árbol de la vida representa la abundancia y la vida eterna que están disponibles para aquellos que tienen fe en Jesucristo. Además, la visión simboliza un estado de paz y armonía, donde la curación y la abundancia están disponibles para todos.
Rev 22:3 Y no habrá más maldición; y el trono de Dios y del Cordero estará en ella, y sus siervos le servirán,
Rev 22:3 Este versículo se encuentra en el capítulo 22 del libro de Apocalipsis, y habla sobre la visión que el apóstol Juan tuvo acerca del final de los tiempos y el nuevo cielo y la nueva tierra que Dios creará. El versículo en particular menciona que no habrá más maldición, lo que significa que todas las consecuencias del pecado original, como la enfermedad, la muerte y el sufrimiento, desaparecerán. Además, menciona que el trono de Dios y del Cordero (Jesucristo) estarán en la nueva Jerusalén, que es la ciudad santa y el hogar eterno de los creyentes. Y dice que los siervos de Dios le servirán, lo que se refiere a todos aquellos que han creído en Él y le han seguido, quienes tendrán el privilegio de vivir en la presencia de Dios y adorarle por toda la eternidad sin ninguna limitación. En resumen, este versículo nos habla sobre la esperanza que tenemos los creyentes en un futuro glorioso en el que todas las cosas serán restauradas y Dios reinará para siempre en su trono, rodeado de sus siervos que le adorarán por toda la eternidad.
Rev 22:4 y verán su rostro, y su nombre estará en sus frentes.
Rev 22:4 Este versículo se refiere a la visión que tendrán los creyentes en el cielo. Habla de ver el rostro de Dios, lo cual significa estar en la plena presencia de Dios y tener una experiencia personal con Él. También se menciona que el nombre de Dios estará en las frentes de aquellos que han sido salvados por su gracia, lo cual indica una identificación clara de aquellos que pertenecen a Él y han sido rescatados por su amor. En resumen, este versículo habla de la gloria y cercanía que los creyentes experimentarán en la presencia de Dios.
Rev 22:5 No habrá allí más noche; y no tienen necesidad de luz de lámpara, ni de luz del sol, porque Dios el Señor los iluminará; y reinarán por los siglos de los siglos.
Rev 22:5 Este versículo habla del cielo, el lugar donde los creyentes irán después de su muerte. En el cielo, no habrá oscuridad ni falta de luz, porque Dios proporcionará su propia luz y todo estará iluminado. Los habitantes del cielo reinarán para siempre y nunca experimentarán la muerte o el dolor. Este versículo nos da una imagen de un futuro feliz y eterno para aquellos que creen en Dios y siguen sus mandamientos.
Rev 22:6 Y me dijo: Estas palabras son fieles y verdaderas. Y el Señor, el Dios de los espíritus de los profetas, ha enviado su ángel, para mostrar a sus siervos las cosas que deben suceder pronto.
Rev 22:6 Este versículo se refiere al apóstol Juan, quien en una visión tuvo la oportunidad de ver y comprender la revelación divina sobre el fin de los tiempos. En este caso, el ángel le confirma que las palabras que ha oído son verdaderas y que provienen del Señor, quien ha enviado al ángel para revelar estas cosas a sus siervos. En general, este versículo es una confirmación de la veracidad y la importancia de la revelación que se está presentando.
Rev 22:7 ¡He aquí, vengo pronto! Bienaventurado el que guarda las palabras de la profecía de este libro.
Rev 22:7 Este versículo se refiere a Jesucristo, quien habla y dice que viene pronto. Se refiere a su regreso a la Tierra como la segunda venida. Y aquellos que han leído y entendido las profecías del Libro del Apocalipsis, han guardado sus palabras y las han aplicado a sus vidas, serán considerados bienaventurados. Esto significa que serán bendecidos con la salvación eterna y con privilegios especiales en el reino de Dios. Por lo tanto, es vital que seamos fieles en nuestro estudio y aplicación del Libro del Apocalipsis y estemos preparados para la llegada del Señor Jesucristo.
Rev 22:8 Yo Juan soy el que oyó y vio estas cosas. Y después que las hube oído y visto, me postré para adorar a los pies del ángel que me mostraba estas cosas.
Rev 22:8 En este versículo Juan está hablando acerca de su experiencia de haber visto y oído las revelaciones que Dios le había dado en el libro de Apocalipsis. Sin embargo, después de haber visto y oído estas cosas, se postró para adorar a los pies de un ángel que le mostraba las revelaciones. La razón por la que Juan hizo esto pudo haber sido por confusión o por no entender completamente lo que estaba sucediendo en ese momento. También muestra la tendencia humana a idolatrar a aquellos que parecen tener poder o conocimiento superior. Sin embargo, el ángel le corrigió inmediatamente y le dijo que no lo hiciera, porque solo Dios debe ser adorado. Este versículo nos muestra la importancia de no caer en la tentación de adorar a cualquier otra cosa o persona que no sea Dios.
Rev 22:9 Pero él me dijo: Mira, no lo hagas; porque yo soy consiervo tuyo, de tus hermanos los profetas, y de los que guardan las palabras de este libro. Adora a Dios.
Rev 22:9 En este versículo, el apóstol Juan está narrando una visión que tuvo del ángel que le había estado mostrando las maravillas del cielo y de la nueva Jerusalén (Apocalipsis 21 y 22). Cuando Juan se inclina para adorar al ángel, éste le dice que no lo haga, porque él es consiervo (o siervo igual) de Juan y de todos los que creen en Cristo, así como de los profetas del Antiguo Testamento y de todos los que han guardado las enseñanzas de este libro (Apocalipsis). El ángel le indica a Juan que sólo Dios debe ser adorado, pues sólo Él es digno de toda alabanza y adoración. Por tanto, el versículo nos recuerda que debemos centrar nuestra adoración y devoción en Dios y no en ningún ser creado, sea ángel, profeta o cualquier otro ser humano.
Rev 22:10 Y me dijo: No selles las palabras de la profecía de este libro, porque el tiempo está cerca.
Rev 22:10 Este versículo se encuentra en el último capítulo del libro de Apocalipsis. En él, el apóstol Juan está recibiendo una revelación de Dios sobre el futuro de la humanidad y el reino de Dios en la tierra. Aquí, un ángel le habla a Juan y le dice que no selle las palabras de la profecía de este libro. La razón por la que se le dice a Juan que no selle las palabras de la profecía es porque el tiempo está cerca, lo que significa que los eventos profetizados en el libro de Apocalipsis se están acercando y pronto se cumplirán. Además, sellar las palabras de la profecía impediría que otros puedan leer y entender lo que está por venir, lo que sería perjudicial para su salvación y preparación. En resumen, este versículo es una advertencia para no ignorar ni esconder las palabras de la profecía de este libro, sino para leerlas y entenderlas para poder estar preparados para lo que está por venir.
Rev 22:11 El que es injusto, sea injusto todavía; y el que es inmundo, sea inmundo todavía; y el que es justo, practique la justicia todavía; y el que es santo, santifíquese todavía.
Rev 22:11 Este versículo hace referencia al juicio final, cuando se separará a los justos y a los injustos. Se dice que el que ya es injusto, continuará siéndolo, y el que ya es inmundo, continuará siendo inmundo. Esto significa que no habrá oportunidad de arrepentirse y cambiar de actitud y comportamiento después del juicio final. Por otro lado, el que ya es justo debe seguir practicando la justicia y el que ya es santo debe seguir santificándose. Esto indica que quienes han vivido de manera recta y siguiendo los principios divinos, continuarán haciéndolo en la eternidad. En resumen, este versículo presenta una advertencia para los injustos e inmundos y una exhortación a los justos y santos.
Rev 22:12 He aquí yo vengo pronto, y mi galardón conmigo, para recompensar a cada uno según sea su obra.
Rev 22:12 En este versículo, el apóstol Juan está describiendo una visión en la que Jesucristo dice: "He aquí, yo vengo pronto". Jesucristo se refiere a su segunda venida a la tierra, cuando regresará para juzgar a los vivos y a los muertos. En el versículo, Jesucristo también promete traer su galardón con él. El galardón se refiere a las recompensas que recibiremos por nuestras obras y acciones en esta vida. En otras palabras, Jesucristo nos está diciendo que cuando regrese, traerá consigo las recompensas que merecemos por nuestro trabajo en la tierra. La idea principal detrás de este versículo es que nuestras acciones en esta vida tienen consecuencias eternas. Jesucristo nos insta a vivir nuestras vidas de la mejor manera posible y a hacer el bien a los demás, porque nuestras acciones serán evaluadas y premiadas en su segunda venida.
Rev 22:13 Yo soy el Alfa y la Omega, el principio y el fin, el primero y el último.
Rev 22:13 Este versículo significa que Dios es el principio y el final de todas las cosas. El Alfa es la primera letra del alfabeto griego y el Omega es la última letra, lo que significa que Dios es el principio y el fin de todo el universo. Como creador del mundo, Él estaba presente desde el principio de la creación y estará allí hasta el fin de los tiempos. Además, este versículo también revela que Dios es el primero y el último, lo que significa que Él no tiene igual y es el único digno de nuestra adoración y alabanza. En resumen, este versículo nos habla de la eternidad y la infinitud de Dios, y su poder y autoridad sobre todas las cosas.
Rev 22:14 Bienaventurados los que lavan sus ropas, para tener derecho al árbol de la vida, y para entrar por las puertas en la ciudad.
Rev 22:14 Este versículo se encuentra en el último capítulo de la Biblia (Apocalipsis 22:14) y se refiere a la bienaventuranza de aquellos que han lavado sus ropas en la sangre del Cordero, Jesucristo. El lavar nuestras ropas significa arrepentirnos de nuestros pecados y aceptar a Jesús como nuestro salvador, lo que nos permite tener derecho al árbol de la vida y entrar por las puertas de la Nueva Jerusalén, la ciudad celestial. La imagen del árbol de la vida se remonta al jardín del Edén en el libro del Génesis, donde se presenta como un símbolo de vida eterna y comunión con Dios. En este contexto, el acceso al árbol de la vida representa la plenitud de la salvación y la vida eterna.
Rev 22:15 Mas los perros estarán fuera, y los hechiceros, los fornicarios, los homicidas, los idólatras, y todo aquel que ama y hace mentira.
Rev 22:15 Este versículo es parte del último capítulo de la Biblia, que describe el nuevo cielo y la nueva tierra que Dios ha prometido a aquellos que le aman y le obedecen. El versículo en cuestión habla sobre aquellos que no tendrán acceso al cielo, ya que han vivido vidas inmorales y pecaminosas. Los "perros" se refieren a aquellos que son impuros e inmundos, mientras que los hechiceros son aquellos que practican la magia y la brujería. Los fornicarios son aquellos que han mantenido relaciones sexuales fuera del matrimonio, los homicidas son aquellos que han matado a otros y los idólatras son aquellos que han adorado a falsos dioses. Por último, se menciona a aquellos que aman y hacen mentira, lo que se refiere a aquellos que viven una vida de engaño, mentiras y falsedad. En resumen, este versículo señala que aquellos que viven en pecado y no se arrepienten tendrán su lugar en el infierno y no en el cielo.
Rev 22:16 Yo Jesús he enviado mi ángel para daros testimonio de estas cosas en las iglesias. Yo soy la raíz y el linaje de David, la estrella resplandeciente de la mañana.
Rev 22:16 Este versículo es un mensaje de Jesucristo al final del libro del Apocalipsis, el último libro del Nuevo Testamento. Jesús dice que ha enviado a su ángel para dar testimonio de las cosas que se han revelado en el libro a las iglesias. Luego, Jesús se presenta a sí mismo como la raíz y el linaje de David. Esto se refiere a que Jesús es el descendiente del rey David de la Antigua Alianza, que fue un ancestro importante en la línea de la familia de Jesús. Finalmente, Jesús se describe a sí mismo como "la estrella resplandeciente de la mañana". Se cree que esto se refiere a que Jesús es la fuente de luz y esperanza en un mundo oscuro y caótico, y que su venida traerá un nuevo amanecer para la humanidad.
Rev 22:17 Y el Espíritu y la Esposa dicen: Ven. Y el que oye, diga: Ven. Y el que tiene sed, venga; y el que quiera, tome del agua de la vida gratuitamente.
Rev 22:17 Este versículo se encuentra al final del Libro de Apocalipsis y representa la invitación final de Dios a toda la humanidad a acercarse y recibir la promesa de vida eterna. El Espíritu Santo y la Iglesia (representada como la esposa en el versículo) se unen para invitar a todos los que deseen a beber del agua de la vida, que es simbólica de la gracia y la salvación de Dios. Todo aquel que escuche esta invitación puede unirse y tomar dicha agua de manera gratuita, sin importar su raza, género o religión. Es una muestra del amor y la misericordia de Dios para toda la humanidad.
Rev 22:18 Yo testifico a todo aquel que oye las palabras de la profecía de este libro: Si alguno añadiere a estas cosas, Dios traerá sobre él las plagas que están escritas en este libro.
Rev 22:18 Este versículo se refiere a la importancia de respetar la integridad y la autoridad de las escrituras bíblicas. Quiere decir que aquellos que intenten agregar o quitar algo de la Palabra de Dios, serán castigados con las mismas plagas y juicios que se mencionan en el libro de Apocalipsis. En otras palabras, esto es una advertencia seria de que la Palabra de Dios no debe ser manipulada ni alterada de ninguna manera. Es importante tomar en serio la verdad y la integridad de los escritos bíblicos, y no añadir ni quitar nada de ellos.
Rev 22:19 Y si alguno quitare de las palabras del libro de esta profecía, Dios quitará su parte del libro de la vida, y de la santa ciudad y de las cosas que están escritas en este libro.
Rev 22:19 Este versículo es una advertencia seria a todos los que leen y estudian el libro de Apocalipsis en la Biblia. Dice que si alguien quita o elimina cualquier palabra o parte de este libro, Dios le quitará su parte de la vida eterna y de la ciudad santa (el cielo) que se describen en el libro. Esto significa que la edición o manipulación del texto sagrado no está permitida y puede tener graves consecuencias. Es importante leer y estudiar la Biblia con cuidado y respeto para no malinterpretar o cambiar su mensaje.
Rev 22:20 El que da testimonio de estas cosas dice: Ciertamente vengo en breve. Amén; sí, ven, Señor Jesús.
Rev 22:20 Este versículo se presenta al final del libro de Apocalipsis y se refiere a las palabras de Jesús a través del apóstol Juan. Jesús está diciendo que vendrá pronto y que su venida es un hecho seguro. El llamado a "ven" se dirige a Jesús, pidiéndole que venga a la tierra y establezca su reinado. Los cristianos anhelan el retorno de Jesús para cumplir sus promesas de redención y justicia. El versículo termina con un "Amén", lo cual significa "así sea" o "que así sea", confirmando la verdad de las palabras de Jesús y la espera del cumplimiento de su promesa.
Rev 22:21 La gracia de nuestro Señor Jesucristo sea con todos vosotros. Amén. "}
Rev 22:21 Este versículo es el último versículo del último capítulo del libro del Apocalipsis y es una bendición final que se da a los lectores. La gracia de nuestro Señor Jesucristo se refiere a su amor inmerecido y su bondad hacia nosotros, a pesar de nuestros pecados y errores. La bendición se extiende a todos los que leerán el libro y a todos los seguidores de Jesús. La palabra "Amén" es una afirmación de que la bendición es verdadera y se recibe con gratitud y confianza. En resumen, este versículo es una despedida cálida y una expresión de amor y aprecio por todos los que siguen a Jesús.